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Caitlin Clark provocó la fiebre por la WNBA en 2024

En su primer año de novata en la liga estableció numerosos récords en la cancha, llevando a la liga a nuevas alturas de audiencia. Su impacto trascendió el deporte hacia los negocios, la cultura y la política.

Caitlin Clark.

Caitlin Clark.Reuters

Caitlin Clark tuvo un año 2024 de grandeza. Sus récords deportivos en la WNBA trascendieron la cancha de basquet. La jugadora se ha vuelto imán comercial y de influencia social.

Antes de convertirse en el tesoro de la WNBA y de Indiana, llevó a los Iowa Hawkeyes al campeonato femenil de la NCAA por segundo año consecutivo. Estableció récords de la División I de la NCAA en anotaciones y triples tanto en baloncesto masculino como femenil. También se llevó todos los premios a la jugadora nacional más importante del año.

Indiana la seleccionó como número uno en el draft de 2024. Clark llevó a las Fever de regreso a los playoffs por primera vez desde 2016, terminó como Novata del Año y fue nombrada All-Star. También lideró la liga en asistencias con 8.4 por partido en una sola temporada y la estadística en triples anotados.

El campeonato femenil de la NCAA eclipsó al masculino por primera vez, con un promedio de 18.9 millones de espectadores, la mayor cantidad de la historia, y cuatro millones más que el campeonato masculino. El partido de la Final Four de Iowa contra UConn y el juego de Elite Eight contra LSU también atrajeron a más de 10 millones de espectadores, lo que supera los 9.9 millones de espectadores del partido de campeonato de 2023, el récord anterior del torneo. La temporada regular tuvo un promedio de 1.2 millones de espectadores en ESPN, la emisora más grande de la liga. Esa es la temporada más vista de la liga y un 170% más que el año pasado. Hubo 30 juegos en total entre la temporada regular y los playoffs que promediaron más de un millón de espectadores, 21 de los cuales involucraron a las Fever.

En cuanto a su atractivo comercial, Clark firmó un contrato de ocho años con Nike por valor de 28 millones de dólares (el mayor contrato de calzado para una jugadora de baloncesto) antes de unirse a la WNBA. Todavía no ha recibido un zapato exclusivo (la marca lanzará uno para A'ja Wilson el próximo año), pero probablemente llegará pronto. También tiene acuerdos con Gatorade y ha aparecido en comerciales de State Farm.

Clark recibió un salario de alrededor de 76,000 dólares en el primer año de un contrato de cuatro años y 338,056. Esto provocó el debate sobre si su decisión de convertirse en profesional en lugar de utilizar su año extra en la universidad en realidad iba a hacerle perder dinero debido a las nuevas reglas de la NCAA sobre nombre e imagen. Las jugadoras de la liga se han unido para exigir mejores salarios, que comienzan en los 64,000 dólares y sólo llegan a los 250,000 dólares al año.

Lo que diga Clark provoca eco. La jugadora ha señalado problemas de racismo en la liga y dijo que los comentarios racistas son “tóxicos” y “asquerosos” en una entrevista con Time a principios de diciembre como el Atleta del Año de la revista.

Antes de las elecciones estadounidenses de este año le dio “like” (me gusta) a una publicación en las redes sociales de Taylor Swift respaldando a la vicepresidenta Kamala Harris.

“Eso es lo más importante que puedo hacer con la plataforma que tengo y es lo mismo que hizo Taylor (Swift). Continúo informándome sobre los candidatos que tenemos, las políticas que apoyan; creo que eso es lo más importante que puedo hacer. Y eso es lo que recomendaría a cada persona que tenga la oportunidad en nuestro país”.

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