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¿Cuáles son los retos que enfrentan los administradores de condominios en América Latina?
De acuerdo con el Inegi, del total de viviendas particulares habitadas en México, 5.6% corresponde a departamentos en edificios
La administración de condominios es un elemento clave para preservar la armonía vecinal entre los habitantes de un complejo habitacional; sin embargo, esta tarea presenta distintos retos que son comunes no sólo en México, sino en distintas partes de América Latina.
Se estima que, en México, 1 millón 895,887 viviendas particulares habitadas corresponden a departamentos en edificios, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Estas cifras dimensionan el crecimiento de la vida condominal en el país, situación que es similar en los países de América Latina, pero esto también pone retos a los administradores de condominios, que son los encargados de mantener el buen estado de la propiedad y que se hacen cargo de las funciones financieras y operativas.
Durante la edición de este año de Expocondominios, distintos administradores de condominios de América Latina dieron su visión respecto a los retos que se presentan en la labor diaria de esta figura.
El problema de las cuotas
El tema financiero es uno de los problemas más comunes dentro de las propiedades de América Latina. De acuerdo con Mimi Galussio, administradora de condominios en Argentina, si bien desde el inicio de la vida de la propiedad se establecen las cuotas condominales, que sirven para el mantenimiento de los inmuebles, con el paso del tiempo los inquilinos no toman en cuenta el alza en precios de los algunos de los insumos necesarios, lo cual genera un problema.
"Yo vengo de un país donde hay una inflación mensual, hasta hace cuatro meses de 25%, después pasamos a 12% y en el último mes fue de 4.8% mensual, entonces hay que tener un poco de cintura y de espalda para poder manejar todas esas situaciones", detalló Galussio.
Para Erika Jacobo, administradora de condominios en México, en muchos casos, los inquilinos no toman en cuenta el estado del inmueble, que en ocasiones está deteriorado, por lo que el presupuesto de las cuotas condominales es superado para hacer las reparaciones necesarias.
"A veces, vemos un condominio muy bonito por fuera, pero realmente por dentro está deshecho. Entonces es muy importante saber sobre qué condiciones vamos a trabajar y si se puede trabajar en ese inmueble... La verdad es que hay condominios donde no tienen un buen presupuesto y también no tienen los recursos", declaró Jacobo.
Para Teyra Elhers, administradora de condominios en Panamá, es importante que la empresa que realice esta función sea totalmente transparente desde el inicio de su gestión, pues sólo así los inquilinos tendrán la confianza de que sus recursos son bien aprovechados para el bien común de los habitantes de la propiedad.
"Cuando no comunicamos lo que tenemos que comunicar y cómo lo tenemos que comunicar, entonces se genera un ambiente de inseguridad que hace que se pierda la confianza", apuntó Elhers.
Falta de personal
Un constante reto en los administradores de condominios es la falta de personal, tanto para delegar funciones en la administración de las propiedades a su cargo, como para realizar las labores de mantenimiento al respecto.
"Tenemos un problema muy grande de personal capacitado para poder ayudarnos a nosotros a manejar las comunidades...Eso impide a las empresas de administración, que puedan delegar (funciones) como deberían de hacerlo y poder enfocarse en otros temas", declaró Elhers.
Mimi Galussio indicó que este problema se acentúa en Argentina, debido a que parte de la población recibe subsidios y cuando busca una oferta laboral, prefiere continuar con la recepción de apoyos por parte del gobierno.
"Pensar en gente que gana dinero sin trabajar, es difícil que los puedas contratar", detalló la administradora argentina.
Educación
Las tres administradoras coincidieron en que la educación es vital para mantener la armonía en la vida de los habitantes de los condominios; sin embargo, muchas veces los inquilinos tienen faltas de respeto hacia los administradores, lo cual hace ríspida la relación de estas figuras con los condóminos.
"Yo tuve un condominio (en administración) donde trabajaba muy a gusto, todo iba marchando perfectamente, no me criticaban como persona sino me juzgaban por mi trabajo profesional, pero había uno que otro condómino con el cual no comulgué y desde ahí empezó el choque y eso hace que se pierda la confianza y la tranquilidad para desempeñarme en mi trabajo", explicó Erika Jacobo.
Para Teyra Elhers, la educación es la base de una buena convivencia en un condominio; sin embargo, cuando existen faltas de respeto ya sea entre los condóminos o hacia los administradores, es algo que desgasta la labor de la persona que administra el inmueble.
"Hay un tema que tiene que ver con la convivencia, que también responde a un tema de educación, cuando no somos capaces de convivir de una manera correcta y surgen todos aquellos problemas que a los administradores nos quitan mucho tiempo y que impide que podamos enfocarnos en nuestros temas", destacó Elhers.