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Desarrollo vertical, clave para la eficiencia energética
El aprovechamiento de espacio puede ayudar a los inmuebles a contribuir a la reducción de emisiones de carbono
Para los inmuebles, el aprovechamiento del espacio vertical puede tener un impacto no sólo para el desarrollo, sino también para la localidad donde se ubica y para el medio ambiente.
De acuerdo con Benjamín Romano, fundador y director del despacho LBR&A, la arquitectura vertical permite un crecimiento del entorno urbano más sustentable, ya que en este tipo de inmuebles se privilegia el ahorro de agua y energía para su operación.
“El aprovechamiento del espacio en forma vertical en la arquitectura permite crear mayor eficiencia en las ciudades: facilita una mejor calidad de vida para las personas, hay una mejor conexión con el espacio público y una densidad de construcción más inteligente”, indicó.
Para algunas firmas de arquitectura, la eficiencia energética de los desarrollos no es un tema menor, pues de acuerdo con estimaciones de McKinsey & Company, 40% de las emisiones de CO2 a nivel global provienen de edificios.
Aprovechar el cielo y el suelo, la propuesta sustentable
Para LBR&A aprovechar cada espacio puede ser la diferencia entre contar con una mejor eficiencia energética y urbana, que favorezca al medio ambiente.
Benjamín Romano explicó que incluso el espacio subterráneo permite hacer más eficiente un proyecto vertical.
“Al considerar una buena cimentación se puede incluir un mejor flujo del transporte público y de establecimientos comerciales, como ya sucede en ciudades como Londres o Manhattan”, explicó el directivo de LBR&A.
Sin embargo, el arquitecto recordó que tras la pandemia, buscar espacios abiertos y bien ventilados son elementos que además de dar seguridad al inmueble, permiten confort a su interior.
Eficientes en diseño e inversión
Para la firma LBR&A, encarga de Torre Reforma y que edificó de 246 metros de altura en la Ciudad de México, la propuesta a la que deben enfocarse es no solo a crear espacios eficientes, que resuelvan retos estructurales y sean arquitectónicamente interesantes, sino que deben ser funcionales, ambientales y que impliquen una inversión razonable.
Actualmente el despacho a cargo de Benjamín Romano está a cargo del nuevo Aeropuerto de Puerto Vallarta, el primero NetZero (cero emisiones) de México y Latinoamérica, perteneciente a Grupo Aeroportuario de Pacífico (GAP).
“El aeropuerto tendrá un consumo energético 50% menor, en comparación a otros aeropuertos internacionales de las mismas características. Se estima que arrancará operaciones en la segunda mitad del 2024”, detalló la firma.