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Pese a avance de inversión en la construcción, las vulnerabilidades se mantienen para el 2023
El gasto efectuado en obras creció 2% a tasa mensual en octubre del 2022, luego de una caída en septiembre; la edificación residencial no despierta
En octubre del 2022, la Inversión Fija Bruta en México avanzó 1.4% mensual, un logro que se dio dadas las mejoras en el sector de la construcción, pieza clave para la economía del país.
Según datos ajustados por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el gasto efectuado en la construcción creció 2% a tasa mensual durante el décimo mes del año pasado; aunque, en el comparativo anual el resultado fue negativo (-0.5%).
Al respecto, Marcos Daniel Arias, analista económico de Monex, indicó que octubre fue el mejor mes para la inversión en construcción desde abril, periodo en el que perdió 4.15% de su valor ante la combinación de incertidumbre y el alza de las tasas de interés.
Sin embargo, Monex mantiene expectativas reservadas para el comportamiento de la economía mexicana en los próximos meses, en donde el panorama adverso coloca a las manufacturas y a la construcción como dos de las industrias más vulnerables del 2023.
“Queda la duda de si el desempeño podrá repetirse este año una vez agotada la inercia del rebote por la reapertura de la economía y en medio de un ambiente más complicado para los capitales por la posible recesión en economías avanzadas”, comentó Arias.
Un año de altibajos
La construcción ha sido de los sectores más rezagados en la economía mexicana, ya que no ha logrado recuperar sus niveles prepandemia y su comportamiento tuvo altos y bajos durante todo el 2022.
A inicio del año, en enero, la inversión creció 4.8%; para febrero, tuvo su caída más pronunciada con -6.7%, volviendo a presentar una recuperación de 4.2% en marzo. Mientras que abril (-0.5%), mayo (-2.5%), junio (-0.5%), julio (-0.2) y septiembre (-0.9%) fueron meses negativos para la industria.
Actualmente, la actividad en el sector comienza a moverse, especialmente, por la ejecución de proyectos industriales, comerciales y de servicios.
El gasto en edificaciones no residenciales creció 2.6% a tasa anual en octubre del 2022. Por su parte, la inversión en el segmento de vivienda retrocedió -4%, en comparación con el 2021.