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Se ha descuidado a la vivienda social, se debe apostar a este segmento: Banco Inmobiliario Mexicano
Factores como el alza de precios en los insumos, así como un aumento en las tasas de interés, hacen que los desarrolladores dejen la edificación de casas de menor valor
La población más vulnerable es a la vez la que más sufre los efectos del rezago habitacional, situación que afecta a más de 33 millones de personas en el país; sin embargo, la oferta de vivienda para este segmento cada vez es menor, pues hay factores de peso que hacen que los desarrolladores trasladen su producción a otro tipo de edificaciones.
En este contexto, Banco Inmobiliario Mexicano (BIM) sabe que si bien la apuesta por el segmento de vivienda social, con un valor de hasta 500,000 pesos, parece complicada en la actualidad, es necesario hacerla para reducir el déficit habitacional en el país.
"Cada año vemos que es más difícil que los desarrolladores alcancen a obtener financiamiento para lograr ofrecer viviendas en ese segmento (social) y eso está ocasionando que se construya menos vivienda que en años pasados. No es falta de apetito de la banca, cuando vemos un proyecto viable lo financiamos, el problema es que estamos viendo poco arranque de proyectos", indicó Rodrigo Padilla, director de BIM.
De acuerdo con el directivo de del banco especializado en la atención del sector de la vivienda, en los últimos meses se han encarecido de los costos de los terrenos para su adquisición, y posterior construcción, así como los insumos necesarios para la edificación, lo cual hace que los desarrolladores busquen construir unidades de mayor valor, lo que a su vez provoca que la brecha del déficit de la vivienda se amplíe en lugar de reducirse.
"La brecha por cubrir es grande, hay buenos mecanismos de financiamiento para que las familias adquieran viviendas, pero en este momento el problema, es que, en lugar de estar cerrando la brecha del déficit, se está abriendo, porque está siendo muy cara la adquisición de terrenos y los insumos para la construcción se han encarecido", detalló Padilla.
Esta situación - según Padilla - hace que el financiamiento a los desarrolladores, para la construcción de viviendas no sea tan dinámico, especialmente para los que están dedicados a este segmento.
"Se ve que (el financiamiento a desarrolladores) pierde impulso, pero porque no se está construyendo la suficiente vivienda por los costos. Especialmente vivienda por debajo de los 500,000 o 600,000 pesos y si vemos la pirámide, es donde más población hay que atender, eso está ocasionando que se hagan menos viviendas de las que se hacían antes", destacó el directivo.
Según cifras del Registro Único de Vivienda (RUV), durante el 2021, se inscribieron 257,689 viviendas para edificarse y posteriormente comercializarse; sin embargo, seis de cada 10 eran de un valor a partir de los 585,017 pesos, mientras que el resto, era de los segmentos de menor valor.
Por ejemplo, la vivienda del valor más bajo, con un precio de hasta 345,000 pesos, apenas representó 1.15% del total de unidades inscritas en el RUV en el año anterior.
Somos especializados
El primero de octubre del 2013, BIM obtuvo su licencia como banco. Si bien, desde años antes, ya tenía operación bajo otra figura, la entidad se dice todavía joven en el mercado financiero mexicano.
Para su director general, desde sus inicios a la actualidad el banco ha ido consolidándose en el mercado de la vivienda y su atención se ha concentrado en aquellos desarrolladores que no son atendidos por los grandes bancos, específicamente aquellos que presentan proyectos viables y que ya tienen experiencia en el mercado.
"Lo que hemos hecho en toda la vida es basar nuestras relaciones con los acreditados en el largo plazo y la inmensa mayoría de ellos, que tienen proyectos financiados con nosotros, son clientes que repiten, además de que cada año buscamos crecer nuestra base de clientes... Si bien, vamos buscando nuevos desarrolladores, la clave es la experiencia demostrable, si conocen su nicho y tienen buen producto, van a conseguir financiamiento", destacó Padilla.
Durante el 2021, colocó cerca de 9,500 millones de pesos en créditos destinados al sector de la vivienda; para este 2022, el banco prevé continuar en esta tendencia de crecimiento para apoyar al menos, la edificación de más de 11,000 viviendas.
Padilla consideró que el 2022 se puede calificar con buenas perspectivas, pero moderadas ante el entorno que existe actualmente tanto al interior de la economía como al exterior. "Será un buen año, pero nos seguimos quedando muy cortos para cerrar esa brecha de vivienda, porque si a esto nos dedicamos, también hay que hacerlo bien".
El directivo apuntó que los indicadores como la elevada inflación, el alza en las tasas de referencia, así como el aumento en el costo de los insumos para la construcción, son una mala noticia para el sector de la vivienda, especialmente porque se deja de lado la edificación de unidades de valor del segmento medio y social.
"Cuando no hay una buena oferta de vivienda, pero la demanda está ahí, entonces empiezan a crecer los asentamientos irregulares, se empiezan a construir viviendas precarias que no satisfacen a las necesidades de la población", acotó Padilla.
El banquero destacó la labor de Sociedad Hipotecaria Federal, ya que se ha buscado impulsar a este banco de desarrollo para que incida todavía más en el sector de la vivienda; sin embargo, indicó que es necesario que el organismo sea más flexible en cuestiones como garantías.
Padilla indicó que, en su consolidación, BIM buscará de manera moderada atender los grandes proyectos; sin embargo, su especialización continuará en desarrolladores que apuesten por la vivienda media y social en todo el país.