Buscar
Economía

Lectura 2:00 min

Altos precios del petróleo frenarían recuperación

La recuperación de la economía mundial podría desacelerar significativamente si los precios del petróleo incrementan otro 30%, alertó Philip Suttle, economista del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF).

La recuperación de la economía mundial podría desacelerar significativamente si los precios del petróleo incrementan otro 30%, alertó Philip Suttle, economista del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF).

De acuerdo con el experto, los precios del hidrocarburo ya traían un incremento de 30% seis meses atrás, impulsados por la confianza generada por la recuperación de Estados Unidos.

Había evidencias de que la actividad mundial se recargaba más en la recuperación de EU, observó.

Sin embargo, explicó que al extenderse las tensiones geopolíticas en los países productores de petróleo del norte de África se corre el riesgo de que el precio del hidrocarburo incremente más, lo que impondría severas presiones en la recuperación de la actividad estadounidense, y por ende, en el globo.

Desde Washington, donde están las oficinas del IIF, que agrupa a más de 300 instituciones financieras globales, Suttle precisó que los países del norte de África abastecen una tercera parte de la producción mundial de petróleo, y una quinta parte de la producción de gas. El temor es que las protestas de Bahrein se extiendan hacia Arabia Saudita , dijo.

La amenaza de contagio hacia la débil recuperación económica mundial podría transmitirse vía precios de energéticos e inflación, precisó.

Tensiones sociales

Dijo que al verse amenazada la recuperación de EU, también se ensombrecen las expectativas sobre la actividad mundial y se alimenta el riesgo de tensiones sociales.

La reactivación económica no ha sido suficiente para motivar una reposición de los empleos perdidos. Lo que no es un buen antecedente para la amenaza real de inflación, pues el alto número de desempleados es un caldo de cultivo para la inestabilidad social , advirtió.

El IIF precisa que el componente de precios de energéticos sobre la inflación ha incrementado 8% desde diciembre pasado en Estados Unidos, 11% en la eurozona y 4% en Japón. Este factor se suma a la escalada de los precios de los commodities que también van al alza.

Los precios altos de alimentos y energía actúan como un impuesto al consumo reduciendo la capacidad adquisitiva de la población y podría ser un germen de descontento social , lamentó.

ymorales@eleconomista.com.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete