Lectura 4:00 min
Carstens insta a bancos centrales a mantener medidas contra inflación el tiempo que sea necesario
El director del Banco de Pagos Internacionales, Agustín Carstens, advirtió que la credibilidad y la independencia de los bancos centrales de todo el mundo corren peligro, si no se controlan las altas tasas de inflación mundial.
La fuerte respuesta de los bancos centrales a la inflación debe sostenerse tanto tiempo como sea necesario para llevarla al objetivo de las autoridades monetarias, advirtió el director del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por su sigla en inglés), Agustín Carstens.
Si no se sostiene de forma apropiada el endurecimiento de las condiciones monetarias, a través de tasas de interés más altas, el reciente aumento de inflación mundial puede conducir a un régimen de alta inflación que sería cada vez más difícil de detener, enfatizó.
El mexicano que lidera a la institución que ofrece sus servicios de operación financiera a los bancos centrales del mundo, avisó que pueden presentarse obstáculos en la tarea de llevar la inflación a niveles compatibles con los objetivos.
Pero es fundamental llevarla a la meta, pues de lo contrario se cuestionará la credibilidad de la política monetaria y de la autonomía de los bancos centrales responsables de dirigirla.
Al participar en un seminario de alto nivel, organizado por el Banco Central de Brasil, explicó que cuando el público confía en que el banco central hará lo necesario para mantener a la inflación cerca de la meta, entonces esa meta, en lugar de la inflación actual, se convierte en una referencia clave para la toma de decisiones precios y salarios.
El objetivo único del Banco de México, por ejemplo, es alcanzar una inflación puntual de 3% con un intervalo de permisibilidad de +/-1 punto porcentual. La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos tiene el objetivo dual del máximo empleo y la estabilidad de precios en 2 por ciento puntual.
Si bien los bancos centrales no controlan directamente la inflación, sí pueden influir con sus herramientas de política para equilibrarla, detalló.
“Por lo tanto ha sido apropiado que la mayoría de los bancos centrales de todo el mundo hayan estado endureciendo su política monetaria a través de tasas de interés más altas para restaurar la estabilidad de precios”, declaró.
Credibilidad, la clave
Carstens advirtió desde el inicio de su participación, que retomaría su experiencia como ministros de finanzas y gobernador del Banco de México, para argumentar sobre la relevancia de preservar la fortaleza institucional de los bancos centrales. Esto, para ilustrar como se puede conseguir el éxito de las políticas públicas en el largo plazo y la estabilidad de precios.
Cuando la sociedad confía en sus autoridades, incorpora la determinación de su propio comportamiento y se facilita el cumplimiento de los objetivos, comentó, que al retener esa credibilidad, el público estará dispuesto a aceptar acciones que impliquen costos a corto plazo a cambio de beneficios de largo plazo.
Observó que el repunte mundial de la inflación, resultó en parte de las perturbaciones de la oferta provocadas por la pandemia y la invasión de Ucrania.
Pero también reflejó el estímulo a la demanda agregada de los últimos 15 años, que presentó una particular aceleración a partir de las políticas expansivas, tanto fiscales como monetarias que se aplicaron entre los años 2020 y 2022.
Las políticas públicas deben contar con recursos suficientes y personal con las habilidades técnicas necesarias y un ingrediente aún más fundamental para asegurar el éxito de su ejecución: La confianza de la sociedad en las políticas públicas.
Hecho en México
La confianza se adquiere logrando una serie de objetivos a lo largo del tiempo, señaló. De ahí la importancia de establecer objetivos claros y que proporcionan un punto de referencia contra el cual pueden evaluar las acciones políticas, pues permiten identificar su éxito o su fracaso.
“Hay un bucle de retroalimentación positiva en la dinámica de la confianza. Si las políticas son efectivas y legítimas, es más fácil que las autoridades logren sus objetivos, lo que a su vez retroalimenta la confianza produciendo un círculo virtuoso”.
El BIS es el organismo financiero internacional más antiguo del mundo; inició sus operaciones en 1930 y ofrece sus servicios de operación financiera a los bancos centrales. Actualmente son miembros activos 60 instituciones monetarias y bancos centrales, y es liderado por el primer funcionario originario de una economía emergente, que es México, Agustín Carstens.
kg