Buscar
Economía

Lectura 3:00 min

Control de precios disfrazado conducirá a un mercado negro

El plan del gobierno no debe ni puede sustituir el ciclo de alzas del banco central; debe ser un complemento.

Si el plan antiinflación del gobierno mexicano resulta una política de control de precios disfrazada tendrá un impacto negativo en el mercado en términos de producción y crearía un mercado negro, advirtieron estrategas de J.P. Morgan.

“Si bien Andrés Manuel López Obrador ya declaró que el plan no establecerá controles de precios absolutos, queda por verse si no es una política de control de precios disfrazada”, resaltaron.

En una nota enviada a sus clientes, destacaron que el plan que presentará el gobierno para sumarse en la lucha contra la inflación “no debe ni puede sustituir el ciclo de alzas (de tasas) del banco central”.

Tiene que ser un complemento para anclar con éxito las expectativas de inflación de corto, mediano y largo plazo”, refirieron.

Los investigadores del banco de inversión estimaron que los 24 bienes de la canasta básica que podrían ser sujetos de reducción de precios apenas representan una cuarta parte de las presiones al alza en la inflación.

Destacaron que ya hay efectos de segundo orden generalizados que van mucho más allá de los precios en la canasta básica y en consecuencia no esperan un efecto completo en el objetivo de bajar la presión a la inflación.

Un pacto, la opción

En el análisis, liderado por el economista para México en jefe de J.P. Morgan, Gabriel Lozano, observaron que un plan para apaciguar la inflación de forma sostenida y generalizada, debe ir más allá de una estrategia de control de precios.

Tiene que incorporar acuerdos con el sector privado para evitar que se alimenten alternativas en la economía informal para la producción, el empleo y los precios.

“Se necesita un pacto para suavizar las negociaciones salariales anclando el crecimiento salarial del sector público y privado a las expectativas de inflación ex ante, es decir utilizando un rango de 4 a 4.2% en lugar de los niveles ex post (arriba de 7%, donde ha llegado la variación de precios)”.

Los expertos de la firma recomendaron que los salarios mínimos aumenten a un ritmo más lento del observado en los dos años anteriores, para limitar más riesgos al alza que pueden presionar a la inflación.

Empresas presionadas

En el análisis de banco titulado ¿Pacto de precios o control de precios?, subrayaron que el hecho de obligar a las empresas a fijar precios puede presionar sus márgenes.

“Obligar a las empresas, en particular a las pequeñas y medianas con poco o ningún poder de mercado, puede ejercer una mayor presión sobre sus márgenes después de dos años de escaso apoyo gubernamental durante la pandemia”.

Ejecutar una política de precios en el contexto de consideraciones de economía política podría resultar en una estrategia subóptima.

La política de precios no debe estar diseñada para abordar temas de corto plazo para evitar entrar en un ciclo de retroalimentación negativa en la formación de precios, insistieron los estrategas de J.P.Morgan.

ymorales@eleconomista.com.mx

Yolanda Morales Quiroga es “corresponsal itinerante” en organismos financieros internacionales, apasionada de la macroeconomía y la política monetaria y contadora de historias, detrás de sus apuntes de reportera. Oficio en el que se ha desempeñado por 19 años. Reportera de Finanzas Globales, blogger y conductora del Programa en línea de El Economista, Voces en Directo.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete