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Economía

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De los proyectos, 27% modificable en tiempo

Destacan los de apoyo a la función pública.

Si bien el Presupuesto Base Cero representa un reto para el gobierno federal debido a que 73% de su gasto es inamovible, hay programas que sí podrían modificarse y representar un ahorro para las finanzas públicas.

Sunny Villa, investigadora del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) destacó que 5.29% de los programas que dependen del gobierno federal pueden ser modificados en el corto plazo (en menos de un año); mientras que 21.71% en el mediano plazo y 73% del presupuesto es modificable en el largo plazo (un año o más).

Los principales programas a los que se les puede modificar el presupuesto son los que se identifican como de apoyo a la función pública y al mejoramiento de la gestión, que representan 5.29% del PEF , aclaró.

También indicó que en esta parte se incluyen programas como Actividades de Apoyo a la Función Pública y Buen Gobierno, Planeación, Seguimiento y Evaluación de Políticas Públicas, así como el de Promoción y Fomento, que en conjunto suman recursos por 250,686 millones de pesos, que llegan a representar 1.37% del Producto Interno Bruto (PIB).

Los programas que pueden ser modificables en el mediano plazo son aquellos que están sujetos a reglas de operación, otros subsidios, provisiones de bienes públicos, funciones de las fuerzas armadas, desastres naturales y obligaciones de cumplimiento de resolución jurisdiccional. En suma, éstos significan un gasto de 1 billón 28,859 millones de pesos; es decir, 21.71% del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) y 5.63% del PIB.

El gobierno debe tener mucho cuidado con las evaluaciones de los programas que fondea. Los ciudadanos debemos cuestionarnos en qué está gastando el dinero el gobierno y si realmente está sirviendo , expresó.

En el caso de los programas ineludibles, que implican un gasto programable de 52.82% del PEF y del no programable de 20.18%, se podrían esperar cambios hasta en un año o más, resaltó la investigadora del CIEP.

Detalló que la prestación de servicios públicos, pensiones y jubilaciones, gasto federalizado, proyecciones de inversión y las aportaciones a la seguridad social representan más de 2 billones 503,254 millones de pesos.

A las participaciones para las entidades y municipios, los costos financieros a la deuda y adeudos de los ejercicios fiscales anteriores, que pertenecen al gasto no programable, se destinan 956,373 millones de pesos.

Expuso que mientras el gobierno no rediseñe o priorice los programas que realmente están dando beneficios a una sociedad objetivo, el gasto para desarrollo social seguirá creciendo y sólo ocasionará que los programas en el largo plazo se financien con deuda.

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