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Elecciones de EU y México riesgo para el nearshoring
La coincidencia de las elecciones de Estados Unidos y México puede poner el pie en la actividad económica y el impulso que está otorgando el nearshoring, advirtió la directora de Análisis Económico en Banco Base, Gabriela Siller.
La coincidencia de las elecciones de Estados Unidos y México puede poner el pie en la actividad económica y el impulso que está otorgando el nearshoring, advirtió la directora de Análisis Económico en Banco Base, Gabriela Siller.
Si queda Donald Trump en la presidencia, puede retomar su política de “Hacer grande de nuevo a América” e incentivar a las empresas a llegar a su país, lo que cerraría la oportunidad que sí representa la relocalización de empresas hacia México, refirió.
Al participar en la conferencia del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) sobre Perspectivas económicas para el 2024, dijo que otros factores de riesgo para el desempeño de la economía son la inseguridad pública, la incertidumbre por el manejo de la economía doméstica, así como la que podrían generar otras iniciativas de reformas o la posibilidad de que Estados Unidos vuelva a llevar a México a paneles por asuntos relacionados al sector energético.
La especialista estima que la economía mexicana conseguirá un crecimiento entre 2 y 2.5% el próximo año, que mostrará una moderación desde 3.2% o 3.5% que se conseguirá este año.
En la misma sesión, la economista jefe de Finamex, Casa de bolsa, Jessica Roldán, observó que las inversiones por el nearshoring ya están fluyendo hacia México, y es lo que está dando décimas importantes al crecimiento económico, que de otro modo no tendría el PIB.
Anticipa como riesgos la coincidencia de las elecciones presidenciales de México y Estados Unidos que podrían llevar al tipo de cambio a registrar mayores presiones de las que regularmente se presentan en procesos similares.
Déficit y reglas del juego, más retos
Preocupa cómo regresará el próximo gobierno a déficits mucho más manejables, pues para lograr las proyecciones del gobierno actual, de pasar el déficit fiscal de 5% del PIB en el 2024 a uno cercano a 2% en el 2025, se requieren importantes reducciones del gasto e incluso una reforma fiscal.
De darse el caso, existe el riesgo de que la economía enfrente presiones a la baja en su actividad. La experta anticipa un crecimiento del PIB de 3.5% este año y de 2.25% para el próximo.
Ahí mismo el moderador y presidente del Comité nacional de estudios económicos del IMEF, Mario Correa, advirtió que para potenciar la llegada de inversiones productivas, se debe otorgar certeza jurídica, mejorar la infraestructura, garantizar acceso a energías limpias a precios suficientemente competitivos. Sería un cambio radical de rumbo que limitaría un mayor deterioro social.
Recortarán tasa hasta 2024
La incertidumbre mundial que está alimentando el conflicto en Israel, puede generar presiones en la inflación y alimentar la posibilidad de que la tasa de interés de México siga sin cambio el resto del año, coincidieron los analistas.
De hecho, las expertas de Banco Base y Finamex concuerdan que será hasta el primer semestre del 2024, cuando se presentará un recorte en la tasa y que desde ahí, el trayecto será muy gradual a la baja.
De acertar, la tasa terminará el año en 11.25% y la gradualidad en los recortes será para limitar una afectación mayor en el tipo de cambio, consideró Roldán.
Para Correa es altamente probable que la tasa a fines del año entrante terminará alrededor del 10 por ciento.
Siller estima que la inflación registrará una variación de 3.5% el próximo año si no se materializa el déficit fiscal propuesto por el gobierno de casi 5% del PIB. En caso de que siga avanzando en el Congreso la aprobación del Presupuesto, sin cambios, el mayor estímulo fiscal generaría presiones al alza en la inflación que la llevarían a terminar el año en 3.9 por ciento.
Ahí también estaría el argumento para una gradualidad en el recorte de la tasa, subrayó.