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Gobierno gastó menos de lo programado en pago de deuda, pese a tasas altas
Fortaleza del peso permitió que en los primeros 10 meses del año el desembolso fuera de 600,162 millones de pesos, lo que representó un crecimiento anual de 11.3 por ciento.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador continuó destinando menores recursos a lo aprobado al costo financiero de la deuda, de acuerdo con los datos divulgados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de enero a octubre de este año.
Entre enero y octubre, el gobierno desembolsó 600,161 millones de pesos para pagar el servicio de la deuda, lo que representó un crecimiento de 11.3% en comparación con el mismo periodo del año pasado.
Aun con el crecimiento a dos dígitos y un ambiente en donde los bancos centrales han endurecido su política monetaria por los altos niveles de inflación, los recursos que se destinaron al costo financiero fueron 3,821 millones de pesos menos a los que se tenían aprobados para el periodo.
James Salazar, subdirector de Análisis Económico de CIBanco, explicó que los menores recursos que se destinaron al servicio de la deuda se explican por la apreciación que el peso ha presentado frente al dólar.
Para este año, Hacienda prevé que el costo financiero de la deuda sea de 791,463 millones de pesos; pero ante la inercia que ha tenido el peso en las últimas semanas, es posible que sea menor.
Inflación, el dolor
Los altos niveles de inflación que se han registrado en México y otros países han llevado a que los bancos centrales eleven sus tasas de interés y, por ende, que el servicio de la deuda que ha sido contratada a tasas no fijas se incremente.
Con una inflación que apunta a cerrar por arriba de 8% este año, Banco de México ha aumentando su tasa de interés de referencia.
En su última reunión de política monetaria, en noviembre, la incrementó en 75 puntos base, para llevarla a un nivel histórico de 10.00 por ciento.
Es por eso que este año el costo financiero de la deuda mexicana presenta el mayor registro desde el último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando aumentó 12.2 por ciento.
Desglosado, el costo financiero de créditos internos de enero a octubre fue de 405,886 millones de pesos, 23.2% más que hace un año, mientras que el servicio de la deuda externa fue de 194,274 millones de pesos, 7.3% menos que hace un año.
Presión para las finanzas
El costo financiero de la deuda es una de las grandes presiones para las finanzas públicas, ya que año con año continúa incrementando y dejando menores recursos para hacer políticas públicas y destinarlos a otras necesidades de gasto, como educación o salud.
Para el siguiente año, Hacienda proyecta que el costo financiero sea de 1.07 billones de peso, lo que representa un incremento de 30% respecto a lo aprobado para el 2022.
Así, el costo financiero de la deuda se ubicaría en 3.4% del Producto Interno Bruto (PIB) el 2023, lo que supone un incremento respecto a lo proyectado para este año, de 2.7% del PIB. Se convertiría en su mayor nivel desde 1996, cuando se ubicó en 3.5 por ciento.
“En el comportamiento del costo financiero de la deuda pública presupuestaria como proporción del PIB para el 2023 influyen diversos factores, como son los siguientes: i) el nivel de las tasas de interés; ii) el tipo de cambio; iii) el acervo de deuda ya existente; iv) el crecimiento esperado de la economía, y v) el nuevo endeudamiento que se contrate durante dicho ejercicio”, explicó la dependencia.
El gobierno de López Obrador consideró que el portafolio de deuda ha tenido una adecuada gestión tanto en el mercado local como en el externo, lo que ha permitido “mantener acotada la sensibilidad del costo financiero” ante el aumento de las tasas de interés.
“En el 2023, se continuará con la búsqueda de alternativas que permitan que el portafolio de deuda se encuentre en una posición fortalecida y sostenible, tanto en el corto como en el mediano plazos, a pesar del entorno de volatilidad en las tasas de interés”, indicó Hacienda.