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Inflación en EU apenas se desacelera en noviembre
El IPC tuvo un alza de 3.1% anual, una décima por debajo del registrado en octubre, mientras que el índice subyacente se mantuvo en 4.0%.
La inflación cedió ligeramente durante noviembre en Estados Unidos, situándose en 3.1% anual, frente a 3.2% registrado el mes anterior, de acuerdo con el índice de precios al consumo (IPC) publicado ayer por el Departamento de Trabajo.
El IPC, que se dio a conocer antes del final de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) hoy, aumentó ligeramente en un mes (0.1%) apenas por encima de las expectativas de los analistas.
De su lado, la inflación subyacente –que excluye los precios volátiles de alimentos y energía–, se mantuvo estable en comparación con octubre, en 4.0% a 12 meses, sin embargo, es el registro más bajo en más de dos años.
Es la primera vez en un año que la inflación subyacente no cede. La mala noticia es que la subyacente en el sector servicios (que excluye los alquileres) aumentó” y “la vivienda es muy cara”, mencionó el economista jefe de Oxford Economics, Michael Pearce.
Los precios de los combustibles a la baja (-5.4% anual) fueron el principal factor de la moderación de la inflación el mes pasado.
En el caso de los alimentos, estos subieron pero a menor ritmo, 2.9% en 12 meses, y 1.7% en el caso de los alimentos consumidos en el hogar. En cuanto a la comida para llevar y la comida en restaurantes, el aumento es mucho más marcado (5.3 por ciento).
Los autos usados y los servicios de salud también bajaron.
El presidente Joe Biden destacó “los progresos continuos” para devolver la inflación a un nivel más aceptable y “reducir el costo de vida de los estadounidenses”.
Ven pausa en alza de tasas
Fed inició reunión de política monetaria
La Fed inició ayer su reunión de dos días sobre política monetaria, donde se espera que los responsables políticos mantengan las tasas estables por tercera vez consecutiva, en su lucha contra la elevada inflación.
La reunión comenzó a las 10:30 horas, anunció la Fed en un comunicado.
Ante la casi certeza de una nueva pausa, los operadores y analistas debaten intensamente cuándo empezará el banco central estadounidense a recortar los réditos y con qué rapidez lo hará.
No obstante, la Fed, quien tiene el doble mandato de reducir la inflación hasta su objetivo a largo plazo de 2% y, al mismo tiempo, atajar el desempleo, mantiene viva la amenaza de otra alza de tasas.
“Sería prematuro concluir con seguridad que ya alcanzamos una postura suficientemente restrictiva, o especular sobre cuándo podría relajarse la política”, dijo recientemente el presidente de la Fed, Jerome Powell.
La amenaza de un nuevo incremento choca con la de otros bancos centrales, como el Banco Central Europeo (BCE), cuyos responsables políticos se muestran cada vez más partidarios de poner fin al alza de tasas. El Banco de Inglaterra también se reúne el jueves.
