La caída de Lula recrudece la mala hora económica de Brasil

La captura en horas de la mañana del viernes del ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva por parte de la Policía Federal de ese país, aumenta la crisis política del gigante suramericano y con esto, despierta en los inversionistas extranjeros un estado de desconfianza para entrar a hacer parte de la economía de las naciones de América Latina.

A Brasil, cuya economía fue considerada durante sus años memorables como principal emergente en el panorama mundial gracias a crecimientos del PIB de 7.5%, se le sumó este nuevo capitulo de escándalo tras la captura de Lula con el objetivo de que declarara por el caso de corrupción en Petrobras.

Las fuerzas de seguridad allanaron la mañana del viernes la casa del ex mandatario (2003-2010) a pedido de fiscales que investigan si tanto él como su familia recibieron favores de grandes empresas constructoras.

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La policía allanó también las oficinas del Instituto Lula y casas de familiares y socios de Lula.

"Lula, además de líder partidario, era el responsable final de la decisión de quiénes serían los directores de Petrobras y fue uno de los principales beneficiarios de los delitos. De hecho, surgieron evidencias de que los crímenes lo enriquecieron y financiaron campañas electorales y la caja de su fuerza política", dijo la fiscalía de Paraná, que investiga el caso, en un comunicado.

El procurador Carlos Fernando dos Santos Lima indicó que grandes constructoras acusadas de corrupción en Petrobras pagaron a Lula en forma de donaciones u honorarios por dictar conferencias cerca de 30 millones de reales (unos 8 millones de dólares).

Para Eduardo Sarmiento, director del Centro de Investigaciones Económicas (CIE) de la Escuela de Ingeniería Julio Garavito, la captura va a afectar a toda la región.

Él era una persona muy importante e influyente, esta medida va a tener repercusiones en América Latina y va a reducir un poco la confianza , detalla Sarmiento haciendo alusión a la inversión extranjera en la región.

De llegar a hacerse realidad este pronóstico, Latinoamérica se mantendría en una zona de convulsión de la cual no ha podido salir, pues según el último informe publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) sobre inversión extranjera, los países de la zona continúan disminuyendo la atracción de capital a sus naciones.

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Las entradas de Inversión Extranjera Directa (IED) alcanzaron en el 2014 158,803 millones de dólares, una caída de 16.4% en comparación con el 2013 , factor que mostraría descenso en el 2015, señala un fragmento del informe.

Así mismo, la Cepal advierte variaciones en la proyección del PIB del 2016 en América Latina, lo cual se sumaría al escepticismo que se puede generar en el mercado internacional.

Estas cifras continuarían su tendencia a la baja en países como Brasil con una variación de -2,0% y Venezuela con -7.0 por ciento.

Mientras que los mayores aumentos en la economía estarán en Perú al pasar de 2.8% en el 2015 a 3.4% en el 2016 junto con Bolivia que se mantendrá en 4.5 por ciento.

Por su parte, Bbva Research afirma en una publicación en la que estudia el impacto de Brasil en la economía de América Latina que países como Argentina, Uruguay y Paraguay dependen en gran medida de Brasil en sectores como el bancario, de turismo y comercio de bienes, entre otros.

En el ámbito político, según Mauricio Jaramillo, miembro del Centro de Estudios Políticos Internacionales de la Universidad del Rosario, la captura de Lula confirma un desprestigio político del Partido de los Trabajadores (PT), colectivo al que pertenece la actual presidenta, Dilma Rousseff.

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A Dilma le queda muy complicado decir que ella no sabía nada. Sin duda, esta es la mayor crisis política de los últimos años. Si esta situación salpica a Dilma, la actual presidencia tendrá también que enfrentar una crisis social , apuntó Julio César Botero, docente de asuntos internacionales y política exterior de la Universidad Politécnico Grancolombiano.

Bajo este panorama y a pesar de la fortaleza de la industria en Brasil, el futuro próximo sigue sin solución en uno de los países eje para la región.

(Con información de AFP)

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