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La siguiente administración heredará mayores presiones en las finanzas públicas
Para este año, el gasto público representará 25% del PIB y los ingresos presupuestarios 21.3 por ciento. En total, los ingresos públicos serán de 7.3 billones de pesos, 1.8% menor a lo aprobado para el 2023.
El próximo gobierno mexicano, sin importar el partido, deberá enfrentar mayores presiones en las finanzas públicas, resultado de una combinación de mayor carga del gasto, aumento en las necesidades del mismo, un mayor endeudamiento, así como la ausencia de una reforma fiscal.
Para este año, se propone un gasto histórico por 9.06 billones de pesos; sin embargo, ocho de cada 10 pesos de este presupuesto está comprometido en rubros como pensiones, gasto federalizado y el costo financiero de la deuda, entre otros. Parte de este gasto - 1.9 billones de pesos - será financiado con deuda.
Debido a la caída de los ingresos y al incremento del gasto, el espacio fiscal se reducirá 57% respecto al 2023”, aseveró el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Para este año, mientras que el gasto público representará 25% del Producto Interno Bruto (PIB), los ingresos presupuestarios serán de 21.3% del PIB. En total, los ingresos públicos serán de 7.3 billones de pesos, 1.8% menor a lo aprobado para el 2023.
“El marco macroeconómico para el 2024 luce complicado. Pondrá cierre a un sexenio en el cual la estructura deficitaria de las finanzas públicas, un problema recurrente en la historia reciente del país, no sólo no se habrá corregido, sino que se habrá profundizado (…) la raíz del problema será el bajo crecimiento de los ingresos”, indicó México Evalúa.
De cumplirse las expectativas de Hacienda, añadió, el crecimiento de la recaudación sería de apenas 6.5% frente al 2018, último año del gobierno pasado. En los últimos tres sexenios, el crecimiento de los ingresos, en promedio, fue de 21.3 por ciento.
Si bien este año se espera un incremento de la recaudación de impuestos de 2.1%, esto será insuficiente para compensar la caída de los ingresos petroleros de 24.1 por ciento.
Por lo anterior, en diversas ocasiones se ha advertido de la necesidad de una reforma fiscal ya que, si bien las medidas de fiscalización implementadas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) han logrado sostener la recaudación incluso en periodos de crisis, no son suficientes para las crecientes necesidades de gasto, ni para cubrir los pagos ineludibles.
Rubros por revisar
Ante el aumento del gasto, un mayor endeudamiento, así como presiones en el presupuesto y las necesidades que imperan en éste, además de una reforma fiscal es necesario revisar ciertos rubros.
“Al menos cuatro rubros del gasto deben ser revisados de manera urgente para expandir el espacio fiscal y mejorar el bienestar de las personas. El aumento del gasto para el 2024 carece de una visión de mediano plazo, no toma en cuenta las carencias de la juventud y la niñez, y no tiene perspectiva intergeneracional ni de género”, aseveró el CIEP.
Uno de los cuatro rubros a revisar es el gasto en pensiones, lo cual se ha catalogado como una bomba de tiempo para las finanzas públicas. Para este año, las pensiones tanto contributivas como no contributivas absorberán 22 de cada 100 pesos del presupuesto.