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Moody’s rebaja perspectiva de Reino Unido a Negativa
La calificadora señaló la imprevisibilidad en la formulación de políticas y los riesgos para la asequibilidad de la deuda por un probable aumento del endeudamiento.
La evolución de las políticas y la capacidad del gobierno británico para generar confianza en su compromiso con la prudencia fiscal será una consideración material a la hora de resolver la perspectiva Negativa”.
Moody’s.
Después de S&P y Fitch, la agencia de calificación financiera Moody’s bajó el viernes la perspectiva de la nota de la deuda de Reino Unido de Estable a Negativa, en plena crisis política y financiera.
Tras la renuncia el jueves de la primera ministra, Liz Truss, esta decisión es motivada principalmente por el aumento de la imprevisibilidad de las decisiones de las autoridades, en momentos donde la economía sufre y la inflación está al alza, explicó Moody’s en un comunicado.
La presentación de un minipresupuesto controvertido el 23 de septiembre y la posterior retirada de casi todas las medidas anunciadas, seguida de la renuncia de Truss tras solo seis semanas en el cargo, “ilustran la polarización y la imprevisibilidad creciente del ambiente político de Reino Unido”, estimó Moody’s.
El informe también señala que hay riesgos para la asequibilidad de la deuda del país por el probable aumento del endeudamiento y el riesgo de un debilitamiento sostenido de la credibilidad de la política.
En lo que va del ejercicio 2022-23 iniciado en abril, el endeudamiento se sitúa en 72,500 millones de libras, 26% menos que en el mismo periodo del año anterior, pero el doble que en el periodo abril-septiembre del 2019, antes de la pandemia.
La situación puede socavar los esfuerzos que apuntan a sanear el presupuesto en un momento donde muy probablemente se pidan medidas para aliviar el costo de vida.
La agencia estadounidense mantuvo su nota para la deuda soberana de Reino Unido en “Aa3”. Pero la nueva perspectiva señala el riesgo de una degradación de la nota en los próximos 12 a 18 meses.
Británicos reducen gastos
Como otro reflejo de crisis que se vive en Reino Unido, la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, por su sigla en inglés) informó que el volumen de ventas del comercio minorista cayó 1.4% respecto a agosto, situándose ya por debajo del nivel anterior a la pandemia de Covid-19.
En los tres meses hasta septiembre, las ventas bajaron 2%, la mayor caída desde los tres meses hasta septiembre de 2021.
“Creemos que en general la economía ya está en recesión y lo estará hasta el tercer trimestre del 2023, con una caída del Producto Interno Bruto de alrededor de 2%, similar a la recesión de los años 90”, mencionó Thomas Pugh, economista de la empresa de impuestos y consultoría RSM UK.
Además, las ventas de carburantes fueron 10% inferiores a las de febrero del 2020, ya que los elevados precios hicieron que la gente redujera la conducción para ahorrar dinero.
“El descenso del volumen de ventas en la mayoría de las categorías sugiere que la elevada inflación pesa en el gasto”, señaló por su parte, Ruth Gregory, economista de la consultora Capital Economics.
Los consumidores han contenido su gasto con una inflación que registra 10% y también se enfrentan a la perspectiva de una mayor restricción en el 2023 después de que el nuevo ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, dijera que eliminará los recortes de impuestos previamente planeados por Truss.
El 31 de octubre Reino Unido debe presentar un plan presupuestario que probablemente incluya recortes de gastos y nuevas alzas de impuestos.