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Necesario, plan de estímulo entre Hacienda y Banxico: especialistas
La política fiscal sigue restrictiva y la monetaria expansiva, lo que indica que no existe la coordinación necesaria para impulsar una expansión de la economía.
Tras confirmarse el estancamiento que mantiene la economía mexicana desde hace año y medio, se requiere una respuesta coordinada que involucre a la política monetaria, fiscal y laboral, advierten expertos del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), el think lab veracruzano, Saver; la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y Pantheon Macroeconomics.
El director de Investigación Económica en el think lab veracruzano, Saver, Luis Pérez Lezama, propone que el Banco de México y la Secretaría de Hacienda “den un manotazo conjunto” para evidenciar que actuarán de forma coordinada para contrarrestar el estancamiento y riesgo de recesión”.
Plantea que la Junta de Gobierno podría anunciar un recorte de 75 puntos base en su tasa, para dar una señal contundente sobre la urgencia del momento, por el que atraviesa la economía.
Por su parte, la Secretaría de Hacienda podría otorgar incentivos fiscales de emergencia para los empresarios, de manera que mejore su percepción sobre el contexto y agilicen la inversión que se requiere.
Con él concuerda el director del IDIC, José Luis de la Cruz, quien agrega que se requiere de un acuerdo nacional con el sector privado que proteja al empleo.
Ya vimos la caída de inversión que repercutió en el PIB negativo del sector industrial en el tercer trimestre, aseveró. Si no se presenta una intervención de emergencia que incluya la preservación de las plazas de trabajo, la siguiente etapa que tendremos será la destrucción del empleo.
Los investigadores consultados concuerdan en la relevancia de generar un plan coordinado entre las autoridades económicas que además reconozca la urgencia de la reacción, pues de otra forma seguirá la inercia de la actividad económica y se podría prolongar hasta convertirse en una contracción con repercusión al 2020.
Por su parte, Juan Carlos Moreno-Brid, catedrático de la UNAM, advirtió que si el gobierno no pone en marcha una política fiscal contracíclica, que interrumpa la austeridad antes de que los choques externos sean más adversos, se corre el riesgo de profundizar el deterioro.
Recuerda que con una economía estancada como la mexicana, el Producto Interno Bruto per cápita se reduce. La sugerencia es que México “saque el paraguas” ante el riesgo externo y permita relajar un poco la política de austeridad.
Insuficientes, medidas de Hacienda
El especialista de Saver detalla que las medidas aplicadas por la Secretaría de Hacienda hasta ahora, que pretenden favorecer a un cambio del ciclo, no están funcionando. Y se tiene que agregar a la ecuación un “mal planeado presupuesto federal para el 2020”.
El directivo del IDIC sostiene, por su parte, que la política fiscal sigue restrictiva y la monetaria expansiva, lo que indica que no existe la coordinación necesaria para impulsar una expansión de la economía.
Destaca que el presupuesto de egresos que está en discusión en el Congreso incorpora una reducción de la inversión física de 5.4%, tras una inversión pública que viene cayendo.
De la Cruz sugirió agilizar las compras del gobierno y priorizar lo hecho en México; por otro lado, priorizar el pago a proveedores, principalmente a los de Petróleos mexicanos, y generar así un movimiento adicional al ciclo interno.
Pérez Lezama considera que si se da una coordinación en las políticas económicas, se puede evitar una contracción que se prolongue hacia el año entrante.
Sin lugar para fallos
El economista senior para América Latina en la consultoría Pantheon Macroeconomics, Andrés Abadía, señaló que “un factor que preocupa es que la confianza respecto al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no logra despegar con solidez y con una economía estancada se eleva el riesgo de que se empiecen a dar errores de política económica”, consignó.
Expandir el gasto público con desmesura podría afectar las medidas de riesgo crediticio de la economía mexicana, mencionó.