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Según el índice Big Mac, el peso mexicano está subvaluado frente al dólar
The Economist publicó los resultados del Índice Big Mac, el ejercicio comparativo con el que mesura la subvaluación o la sobrevaluación de una divisa frente al dólar, teniendo en cuenta el precio de la Big Mac, hamburguesa producida y comercializada por McDonald's.
Con la reciente depreciación de peso frente al dólar, que según algunos analistas se debió al aumento de las tasas de la Reserva Federal de Estados Unidos, y otros atribuyen a la reacción de los mercados ante la cancelación de la construcción del aeropuerto en Texcoco decidida por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, la divisa mexicana presenta ahora una subvaluación de 44.48%, si se atiende al Índice Big Mac.
El pasado julio, el diario The Economist publicó los resultados del Índice Big Mac, ejercicio comparativo con el que mesura la subvaluación o sobrevaluación de una divisa frente al dólar, teniendo como referente el precio de la Big Mac, hamburguesa producida y comercializada por la cadena global de comida rápida McDonald's.
Al momento de la publicación del Índice Big Mac, el ejercicio del The Economist situó la subvaluación del peso frente al dólar en 53.3 por ciento. Con los acontecimientos locales e internacionales recientes, y una cotización promedio este jueves es de 20.15 pesos por dólar, la tasa de subvaluación se puede calcular en 44.48%, esto es el porcentaje por el que el peso mexicano está debajo de lo que debiera ser su valor real.
Partiendo del dato del costo de esta hamburguesa en EU, el Índice Big Mac se usa como referencia simple e informal para calcular la paridad del poder adquisitivo (PPA), sistema de medición usado por instituciones como el Fondo Monetario Internacional para comparar el nivel de vida entre distintos países, La teoría de la paridad del poder adquisitivo afirma que los tipos de cambio entre las diversas monedas deben de ser de tal manera que permita que una moneda tenga el mismo poder adquisitivo en cualquier parte del mundo.
Bajo la lógica de que el tipo de cambio debiera moverse hacia una tasa que iguale los precios de una canasta básica idéntica y los servicios (en este caso, una hamburguesa) en cualquier país, si el precio de la hamburguesa está por debajo del precio por el que se comercializa en Estados Unidos, esto sería señal de que la moneda local está subvaluada con respecto al dólar.
El precio actual de la Big Mac en México es de 50 pesos. En Estados Unidos, su costo es de 5.51 dólares. Con un tipo de cambio en 20.15 pesos por dólar, el precio de la Big Mac debiera ser de 111 pesos. De la diferencia entre el precio de comercialización del producto en un país contra el que debiera tener si se toma en cuenta el tipo de cambio y tomando como referencia el costo en Estados Unidos, se obtiene la proporción entre ambas divisas. De esta forma, la Big Mac está en México está 44.48% por debajo del precio de la que se vende en Estados Unidos, de lo que se extrapola que debe ser la relación existente entre el valor del peso y el del dólar.
Suiza y Suecia son los dos países —de los 48 comprendidos en el Índice Big Mac— en los que la hamburguesa es más costosa que en EU: en Suiza, el costo es mayor en 18.8%, y en Suecia, 5.8%, de lo que se sigue que sus monedas están sobrevaluadas con respecto al dólar en la misma proporción. Las naciones en donde la Big Mac es más barata y las monedas están más subvaluadas con respecto al dólar son Ucrania, Egipto y Malasia, con 1.64, 1.93 y 2.28 dólares.
Así, el índice Big Mac se considera un indicador del poder adquisitivo de una economía. El índice Bic Mac ha sido publicado anualmente por The Economist desde 1986 y está calificado como un indicador simplificado del poder de compra individual de un país. La Big Mac es una de las hamburguesas McDonald's más vendidas en el mundo, y se usa como referencia comparativa porque está disponible en casi todos los países y se fabrica en un tamaño, composición y calidad estandarizados.
Compara los precios de Big Mac de cada país, según la paridad de poder de compra. Como muchos países tienen diferentes monedas, los precios estandarizados de Big Mac se calculan convirtiendo los precios promedio nacionales de Big Mac con el último tipo de cambio a dólares estadounidenses.
Subvaluación del peso, cosa sabida
Agustín Carstens, por entonces el gobernador del Banxico, ante el escenario de una fuerte depreciación del peso ante el dólar como resultado de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, declaró el 23 de marzo del 2017 que el peso estaba cotizando mucho más cerca del nivel que debería, aunque aún estaba por debajo de su valor en no más de 10%; ése día, la cotización fue de 18.95 pesos por dólar. La declaración no era nueva. Ya en enero de 2016, Carstens y Luis Videgaray, por entonces secretario de Hacienda, declararon que el peso estaba subvaluado, es decir, que el dólar no debería estar tan caro, atribuyendo esta disparidad a la aversión al riego propio de los mercados. Lo cierto es que una moneda subvaluada tiene efectos favorables para la competitividad y el desarrollo de la economía.
Apreciación del dólar, o el tiro por la culata
Para Benjamin J. Cohen, profesor de Economía Política Internacional en la Universidad de California, Santa Barbara, la actual apreciación del dólar en el mundo podría en el mediano o largo plazo llevar a la mayor economía global al colapso. Donald Trump es de la opinión de que la actual alza del precio de la divisa estadounidense es el resultado de que su administración ha logrado fortalecer la economía. El profesor Cohen, en un artículo publicado a principios de septiembre, recuerda que ya Ronald Reagan y George W. Bush practicaron —al igual que Trump— fuertes recortes a los impuestos, lo que resultó en déficits presupuestarios que llevaron a la Reserva Federal a aumentar las tasas de interés. Con Reagan, estas acciones llevaron al dólar —entre 1981 y 1985— a una apreciación de 60 por ciento. Obligada por la reducción de impuestos a los más ricos realizada por Trump, la Fed debió aumentar las tasas para evitar el efecto inflacionario, opina el economista de la Universidad de California.
“Un dólar que se fortalece aumenta el precio de las exportaciones en el exterior y reduce el costo doméstico de las importaciones, desalentando así las primeras y alentando las segundas”, señala el profesor Cohen en su análisis, a la vez que recuerda que varias naciones, como resultado de la política de Trump de amagar con aranceles para poner la balanza comercial a su favor, han decidido dejar de usar el dólar en sus transacciones comerciales, medida que busca reducir el uso de la moneda estadounidense como divisa de referencia, y que a la larga debilitaría a la economía de Estados Unidos.