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China admite que la economía enfrenta nuevos problemas
Pekín ajustará las políticas de restricción a la compra de viviendas y reducirá las tasas de interés de los préstamos hipotecarios
Xi Jinping, presidente de China, y otros importantes líderes admitieron ayer que la segunda economía del mundo enfrenta nuevos “problemas” y prometieron resolver una crisis de larga data en el sector inmobiliario.
Pekín ha revelado esta semana una serie de medidas para impulsar su maltrecha economía, donde se fija como objetivo un crecimiento de 5.0% este año, una meta que los analistas consideran optimista dados los numerosos vientos en contra que enfrenta.
Ayer, el gobernante Partido Comunista convocó una reunión de su máximo órgano, el Politburó, para “analizar y estudiar la situación económica actual”.
“Han surgido algunas situaciones y problemas nuevos en el funcionamiento actual de la economía”, informó la agencia de noticias Xinhua después de la reunión, a la que asistió Xi.
“Debemos considerar la situación económica actual de manera integral, objetiva y con calma, afrontar las dificultades directamente y fortalecer la confianza”.
Los miembros del Politburó coincidieron en la necesidad de “mejorar aún más el enfoque y la eficacia de las medidas políticas” destinadas a impulsar la economía.
Se comprometieron a “responder a las preocupaciones de la gente” sobre el malestar económico.
Pekín “ajustará las políticas de restricción a la compra de viviendas, reducirá las tasas de interés de los préstamos hipotecarios existentes, además de promover la construcción de un nuevo modelo de desarrollo inmobiliario”, señaló Xinhua.
Lo anterior, sugiere que puede estar en camino un apoyo más sustancial para la economía, dijo Julian Evans-Pritchard, director de economía de China en Capital Economics. “Pero faltan detalles concretos y por eso es difícil juzgar la magnitud de cualquier apoyo fiscal adicional”.
El comunicado da señales de que los recortes de tasas podrían ser mayores de lo anticipado previamente, señaló Evans-Pritchard: “la caída de la inflación y el desapalancamiento del sector privado significan que los recortes de tasas por sí solos no impulsarán dramáticamente la demanda interna”.