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Los consumidores estadounidenses frenan el gasto ante la inflación
Los consumidores estadounidenses han frenado sus gastos en respuesta a los altos precios y al empeoramiento de las perspectivas económicas, informó la empresa de financiamiento al consumo Synchrony Financial.

Los consumidores estadounidenses han frenado sus gastos en respuesta a los altos precios y al empeoramiento de las perspectivas económicas, informó la empresa de financiamiento al consumo Synchrony Financial.
Los estadounidenses han ido acumulando más deudas en medio de tensiones en sus finanzas, con un aumento de la morosidad en los préstamos para automóviles, tarjetas de crédito y líneas de crédito para la vivienda, dijo la Reserva Federal (Fed) el mes pasado.
Patrick Harker, presidente de la Fed de Filadelfia, también ha advertido que pueden estarse gestando problemas para la economía estadounidense, que está mostrando signos de tensión en el sector del consumo, con la confianza de los consumidores también menguando.
El apretón de cinturones indica que los estadounidenses, cuyas finanzas son en general saneadas, han estado estirando sus finanzas en medio de la persistente inflación, mencionó Max Axler, director de crédito de Synchrony. La mayoría de los clientes siguen pagando sus préstamos, añadió.
“Los volúmenes de compra han bajado en todo el sector, ya que los consumidores de todos los grupos de ingresos son más reflexivos a la hora de gastar”, señaló Axler a Reuters.
Synchrony, que emite tarjetas de crédito en asociación con minoristas y comerciantes, tiene más de 100 millones de cuentas de crédito al consumo.
Algunos economistas han advertido que los aranceles generalizados del presidente estadounidense, Donald Trump, podrían disparar los precios y socavar el crecimiento.
La preocupación por el aumento de los precios ha llevado las expectativas de inflación a largo plazo de los consumidores a niveles vistos por última vez a principios de 1993.
Los minoristas, entre ellos Target y Walmart, han dicho que los compradores están siendo cuidadosos con sus gastos, esperando ofertas o haciendo cambios a artículos de menor precio.
Según los analistas, los recortes del gasto de los hogares podrían ser precursores de un aumento de la morosidad en los pagos de créditos o de los impagos de préstamos. Aunque las tasas de morosidad se han mantenido estables en general, el gasto se observa con atención como un indicador precoz del deterioro de las finanzas de los consumidores.
Los prestatarios también podrían volverse más cautelosos, contratar menos préstamos o préstamos más pequeños y reducir una fuente clave de ingresos para los bancos.