Gobierno de Sheinbaum logró reducir déficit fiscal en enero con tijeretazos al gasto

El gobierno de Claudia Sheinbaum logró, en enero pasado, reducir el déficit fiscal a través de tijeretazos en diversos rubros del gasto público, con lo cual empieza con la consolidación fiscal que se espera lograr este año, en medio de la desaceleración de la economía y la incertidumbre por las políticas comerciales de Estados Unidos.

Los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), ahora a cargo de Edgar Amador Zamora, mostraron que en el primer mes del año los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) fueron de 23,019 millones de pesos.

Lo anterior resultó 86.5% menor a lo que se observó en enero del 2024, cuando el déficit fiscal fue de 170,993 millones de pesos, los cuales se fueron acumulando e incrementando mes tras mes para lograr subsidiar las obras de infraestructura insignia del gobierno pasado.

“Para contener el elevado endeudamiento observado al cierre del último sexenio, el gasto público tuvo que ser recortado a inicios del 2025. Comparado con enero del año pasado, sectores críticos para el bienestar social como salud, educación, o gasto en infraestructura, sufrieron recortes superiores a 20%”, destacó la organización México Evalúa.

El informe de Hacienda muestra que en el primer mes del año, el gasto público total sumó 719,258 millones de pesos, lo que representó una caída de 14.4% en comparación con enero del año pasado, así como un subejercicio de 203,274 millones de pesos.

En este sentido, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) indicó que es fundamental que el presupuesto se ejecute de acuerdo con lo programado para prevenir subejercicios y asegurar el cumplimiento efectivo de los objetivos planteados.

La meta de 3.9% del PIB

De acuerdo con el Paquete Económico 2025 – elaborado y presentado previo a las elecciones en Estados Unidos -, para el primer año de gobierno de Claudia Sheinbaum se busca lograr una consolidación fiscal, ello luego del déficit récord que se alcanzó en el 2024 de 5.7% del Producto Interno Bruto (PIB).

Para lograr la reducción del déficit, el Congreso de la Unión aprobó recortes en el gasto en rubros como salud, seguridad, medio ambiente, entre otros, a la vez de que se espera una mayor recaudación de impuestos que ayuden a solventar el gasto público sin recurrir a deuda.

Sin embargo, en los últimos meses, ante la incertidumbre generada por la imposición de aranceles a productos mexicanos, las instituciones y organismos han advertido cómo esto puede llevar a México a una recesión y, por ende, afectar los ingresos públicos, con lo que difícilmente se reducirían los RFSP a la meta planteada.

En tanto, la Presidenta descartó en días pasados que, en caso de una recesión, se recurra a un mayor endeudamiento para solventar el gasto público, el cual hoy en día se ve presionado por el costo financiero y las pensiones.

“Muchísimos países optaron por la deuda durante la crisis económica derivada de la pandemia y todavía están viviendo las consecuencias de esa decisión. Aquí el presidente López Obrador decidió no endeudarse, disminuir el gasto y con esos ahorros impulsar la economía desde abajo. Ese es el proyecto que nosotros tenemos", dijo.