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Los “guardaditos” del gobierno recibirán a Sheinbaum con saldos flacos
Los recursos se usaron casi por completo durante el 2020, cuando se utilizaron para que los ingresos públicos pudieran solventar el gasto sin incurrir en deuda.
Claudia Sheinbaum, primera mujer presidenta de México, empezará su gobierno con unos colchones financieros con saldos muy por debajo de los niveles que se observaron al inicio del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, de acuerdo con la información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En México, las finanzas públicas se cubren por dos tipos de “guardaditos”: el Fondo de Estabilización de los Ingresos Públicos (FEIP) y el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), los cuales pueden ser utilizados en caso de que ocurra algún evento que afecte los ingresos públicos o de las entidades.
Dichos fondos de estabilización fueron utilizados casi por completo durante el 2020 cuando, con la llegada del Covid-19 y la crisis económica que la pandemia ocasionó, el gobierno de López Obrador los utilizó para que los ingresos públicos pudieran solventar el gasto sin incurrir en un mayor endeudamiento.
En el caso del FEIP –que este año estrena nuevas fuentes de financiamiento– su uso fue casi total. Al corte de junio de este año, este fondo suma 49,304 millones de pesos, que si bien es un incremento de 23% en comparación con junio del año pasado, es 87% menor a los recursos que se reportaron durante el primer semestre de gobierno del expresidente morenista.
“Durante el segundo trimestre del 2024, el FEIP registró entradas por 8,664 millones de pesos, derivadas de la transferencia del Fondo Mexicano del Petróleo por 6,111 millones de pesos e ingresos por productos financieros por 2,553 millones de pesos. Por otra parte, se registraron salidas por 0.3 millones de pesos para el pago de honorarios al fiduciario. Se observó una variación cambiaria de 118 millones de pesos”, detalló la Secretaría de Hacienda.
En el caso del FEIEF, se reportó una situación similar. Mientras que en el primer semestre del 2019 sumó 121,351 millones de pesos, al primer semestre de este año el saldo es 89% menor, al ser de tan sólo 12,527 millones de pesos.
Si bien los fondos han sido nutridos a lo largo del año, los expertos han señalado que para lograr regresar a los niveles vistos antes de la pandemia va a tomar muchos años.
Previo a la reforma que entró en vigor este 2024, –para nutrir al FEIP con los ahorros que resulten del gasto en el costo financiero, así como de activos financieros– el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) alertó que tomaría 17 años al fondo alcanzar los niveles del 2018.
“Con escasas reservas y con bajas aportaciones, las finanzas públicas se mantienen vulnerables ante posibles eventualidades económicas y fiscales”, indicó el análisis.
Reforzar con reforma fiscal
En diversas ocasiones, analistas y organizaciones, tanto de la sociedad civil como internacionales, han recomendado a México la implementación de una reforma fiscal progresiva para incrementar los ingresos públicos, sobre todo ante el limitado espacio fiscal con el que se cuenta.
La Alianza por la Justicia Fiscal indicó que, ante las propuestas del nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum de continuar con los programas sociales prioritarios del gobierno pasado, así como implementar nuevos, es necesaria una reforma fiscal progresiva para poder pagarlos.
“La presidencia de Claudia Sheinbaum enfrentará grandes restricciones presupuestales, mismas que no tuvo Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al inicio de su sexenio”, destacó por su parte la organización México ¿Cómo Vamos?
Dichas restricciones se deben a la consolidación fiscal que se deberá realizar en su gobierno, esto para disminuir los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) de 5.9% –un nivel histórico– a alrededor de 3 por ciento.
Para ello, tanto el gobierno como analistas han apuntado que se tendrán que hacer recortes al gasto. Sin embargo, Alejandra Macías, directora del CIEP, indicó que aún con el término de las grandes obras prioritarias de inversión, así como menores tasas de interés a nivel mundial, no ve que esto pueda ser suficiente para disminuir el déficit a lo deseado.
Más austeridad en el gobierno
En el Zócalo, apenas horas después de haber tomado protesta como Ejecutiva Federal, Claudia Sheinbaum enumeró sus 100 compromisos para el segundo piso de la Cuarta Transformación, en donde en el punto número 14 destacó, nuevamente, la “austeridad republicana” instaurada por AMLO en el pasado.
“Se mantendrá la austeridad republicana, la disciplina financiera y fiscal. Continuará un gobierno sin lujos ni privilegios”, dijo Sheinbaum en un discurso similar al que, en su momento, dio López Obrador.
Sin embargo, expertos apuntaron que la austeridad, que fue impulsada en el sexenio pasado, fue selectiva debido a que hubo un mayor gasto en obras de infraestructura y Pemex, entre otros, sacrificando recursos para otros rubros como salud, educación, seguridad, entre otros.
“El objetivo sigue siendo fortalecer a Pemex y la CFE como empresas públicas estratégicas en beneficio de los consumidores domésticos y del interés nacional. Quedaron atrás los tiempos de las privatizaciones”, expresó la Presidenta en su discurso.