Alineación entre la Ley y el futuro laboral: NOM-037

La modalidad del teletrabajo permitió la continuación de las actividades laborales cuando era necesario mantener sana distancia entre las personas. Esta tendencia tuvo impacto legislativo. De acuerdo con la Ley laboral mexicana, el teletrabajo es una forma de organización subordinada que consiste en el desempeño de actividades remuneradas, en lugares distintos al establecimiento del patrón, por lo que no se requiere la presencia física en el centro de trabajo, utilizando primordialmente las tecnologías de la información y comunicación, para el contacto y mando entre el trabajador y el patrón.

En la búsqueda por alinearse con la actualidad del futuro laboral, que consiste en proporcionar una mayor flexibilidad a los empleados para que puedan conciliar mejor la vida profesional con la laboral, el gobierno mexicano dirige esfuerzos a la regularización del trabajo a distancia o home office con la NOM-037, la cual entrará en vigor 5 de diciembre, permitiendo a las empresas establecer pautas legales que estipulen ciertos límites de respeto, incluso si el empleado se encuentra a distancia. Y a los empleados llevar a cabo sus tareas de una manera correcta, respaldados por la Ley Federal del Trabajo, desde sus hogares.

De tal forma que, entre las obligaciones establecidas para los empleadores se encuentran proporcionar herramientas de trabajo, su instalación y mantenimiento, mobiliario ergonómicamente adecuado e insumos, pagar el servicio de telecomunicaciones y una parte proporcional de la electricidad, evaluar las condiciones de trabajo mediante encuestas o visitas. Así como condiciones de seguridad y salud, respetar el derecho de desconexión del trabajador al concluir la jornada de trabajo. Todo con evidencia documentada del proceso.

Por otra parte, entre las obligaciones establecidas para los empleados están el permitir la comprobación física de las condiciones de seguridad y salud en el lugar de trabajo o aplicar la encuesta de verificación, informar cualquier alteración de las condiciones que impidan u obstaculicen el desarrollo del teletrabajo en el lugar acordado, conservar en buen estado los equipos, materiales, útiles y mobiliario proporcionado, y participar en las reuniones presenciales o virtuales.

El teletrabajo debe ser un instrumento eficiente y seguro para la ejecución de las labores encomendadas al trabajador, por lo que la compañía debe proveer los instrumentos necesarios para su realización, cuidando que el ambiente donde se desarrolle el trabajo sea adecuado para prevenir un daño físico al trabajador y evitar el aislamiento social. 

Con el objetivo de asegurar que los empleados realizan correctamente los descansos laborales según la Ley, que no realizan horas extra no autorizadas y que respetan las necesidades empresariales, las organizaciones tendrán que hacer uso de una herramienta que simplifique el seguimiento de las diferentes jornadas laborales.

Por lo que las organizaciones estarán en capacidad de gestionar la flexibilidad laboral de sus empleados sin perder el control, con soluciones que permitan incorporar un sistema automatizado y parametrizado de la gestión de turnos, ausencias, vacaciones, home office, etc.

Para vigilar el correcto cumplimiento del trabajo híbrido o a distancia será indispensable automatizar ciertos procesos como el registro de asistencia, el control de ausencias, etc. y así llevar a cabo un seguimiento ágil de las diferentes jornadas laborales.

Además, al disponer de la analítica apropiada, los profesionales de Recursos Humanos y de Nómina, tendrán capacidad de generar análisis, evaluaciones y obtener resultados del rendimiento y la proactividad de las jornadas híbridas de sus empleados de forma ágil y objetiva.