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¿Cómo resolver los conflictos en las empresas familiares?
Es importante separar los problemas personales del negocio y aprender a manejar las emociones
En México, solo el 30% de las empresas familiares pasa a la siguiente generación, entre las causas destacan los problemas personales entre la familia y el no saber separar las cuestiones personales de las del negocio.
De acuerdo con Gerardo Macias, socio de la firma DHR Global, muchas veces la empresa familiar no trasciende por problemas personales y falta de comunicación, pues no siempre el papá —que suele ser el director de la empresa— y los hijos están en la misma sintonía.
Igual y el papá está aferrado a que la empresa continúe con los hijos, pero tal vez la mayoría de los hijos no quieren estar ahí o están pensando en otro emprendimiento o trabajar en otra cosa”, destacó el especialista.
El manejo de las emociones también influye, porque no se suele separar el negocio de la parte personal, por ello es importante fomentar una comunicación transparente y crear procesos de institucionalización.
Sin embargo, 49% de las empresas familiares corre el riesgo de no subsistir ante la falta de estos procesos, de acuerdo con el estudio “Nivel de progreso de las Empresas Familiares para lograr su continuidad y armonía”, realizado por el Centro de Investigación para Familias de Empresarios CIFEM-BBVA de IPADE Business School.
Solución de conflictos
Cuando ocurre un conflicto en la compañía hay dos formas de solucionarlo: a interior de la empresa o fuera de esta, lo recomendable es hacerlo de forma interna, en una asamblea familiar o consejo familiar, a fin de que el conflicto no se haga público y se resuelva de la mejor forma.
También se puede apostar por la negociación, en este caso se busca el origen del conflicto y se habla con los involucrados; se dialoga y recurre a una mediación, sin necesidad de que intervengan terceros.
La resolución de conflictos exterior debe considerarse como última medida y cuando los procesos internos no dieron resultados, debido a que en esta etapa los conflictos se hacen públicos y se llevan a instancias legales, que pueden ser largos y costos. Además, hacer públicos los puede afectar la reputación de la empresa.
Asamblea familiar
Crear una asamblea familiar, para la resolución de conflictos, requiere establecer protocolos, definir objetivos en común y poner metas claras, así como establecer roles y responsabilidades a cada miembro de la familia.
Con estas bases se crea un comité y se usan herramientas para desarrollar la inteligencia emocional de los involucrados, para que puedan platicar entre sí y evitar que el conflicto crezca. “Aunque el conflicto pueda parecer muy espeluznante siempre hay una opción práctica”, destaca Macias.
Por ejemplo, si un socio quiere vender su parte, siempre hay la opción de que otro socio lo compre, el problema es cuando el dueño fallece y no hay protocolos de sucesión.
De acuerdo con el IPADE Business School, solo 5% de las empresas familiares tiene procesos de sucesión, lo cual pone en riesgo la permanencia del 50% de las organizaciones.
Por ello Macias recomienda establecer protocolos de sucesión a fin de estar un paso delante de cualquier problema o fallecimiento y evitar conflictos.
Normas de comportamiento
La mejor forma de resolver los conflictos es evitarlos, por ello se recomienda establecer normas de comportamiento, que se basen en el respeto mutuo y fomentar la comunicación transparente. Una opción es crear un sistema de retroalimentación, donde cada miembro puede dar su punto de vista de forma privada
“Muchas veces, aunque suene muy burdo, es como los niños, decirles a qui hay reglas y eso no se permite; si te exaltas o le faltas el respeto a alguien te sales de la junta y cuando te calmes regresas”.