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Guía para convertir tu "changarro" en un negocio líder
En un entorno como el que vivimos actualmente, donde el semáforo epidemiológico está en verde y la recuperación económica va al alza, ¿cómo pasar de ser un changarro a convertirte en una marca líder? Te compartimos una serie de puntos a seguir.
Uno de los deseos de los emprendedores es tener un negocio prospero, que a pesar de la incertidumbre crezca, a esto se suma tener capacidad de innovación y profesionalizar los servicios.
Ante un panorama tan complejo como el que vivimos durante el 2020 por la crisis sanitaria y que aún le sigue pegando a los pequeños empresarios, pues 46% de las pequeñas y medianas empresas dicen no tener la capacidad de llegar a los próximos 12 meses si las ventas continúan como hasta ahora, de acuerdo con datos de la encuesta sobre el impacto generado por la Covid-19 en las empresas (ECOVID-IE), realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Además, durante la pandemia, las empresas formales voltearon a ver el sector informal, debido a que no tuvieron la solvencia económica suficiente para cubrir los gastos que representó la crisis sanitaria. Según datos del INEGI, en 2020 el 62.6% de los negocios pertenecían al sector informal del país, lo cual no solo representa un menor respaldo a los bienes tangibles de la empresa, sino que en conjunto, significa una preparación y nivel de competencia deficiente que puede privar a empresas de tener mayores oportunidades estratégicas, laborales y de capacitación.
“Las marcas no pueden (ni deben) crecer a destajo, sin una estrategia bien establecida que les permita convertir a sus empresas en referentes del sector donde se desarrollan. Volverse más competitivos no significa solo vender, sino tener la capacidad de innovar, mantenerse y crecer”, revela José Luis Álvarez, director general de Comint, agencia de branding.
En un entorno como el que vivimos actualmente, donde el semáforo epidemiológico está en verde y la recuperación económica va al alza, ¿cómo pasar de ser un changarro a convertirte en una marca líder? Te compartimos una serie de puntos a seguir.
1. Ser marca registrada
Registrar una marca no solo es uno de los elementos principales para profesionalizarse, sino que éste es la principal protección para el “secreto” más valioso de un negocio: Lo intangible, aquello que no se puede oler, ver o escuchar pero sí permite contar con un elemento diferenciador, recuerda, no hay dos marcas iguales, asegúrate de proteger la tuya.
2. Trabajan desde un propósito claro
Desde saber cómo se está cambiando al mundo y qué se hace para aportar valor a las personas, las empresas y sus colaboradores deben tener un camino claro y conocer a profundidad por qué hacen lo que hacen. Es importante recordar que las marcas no se diseñan de un día para otro, estas deben ser construidas y mejoradas todos los días. El éxito no viene de la improvisación y del azar.
3. Todo es estrategia
Suena como algo fundamental, pero en ocasiones este factor suele ser dejado de lado, permitiendo que las decisiones de una empresa se vuelvan más personales, sesgando la realidad del mercado donde un negocio desarrolla sus actividades. Mantenerse neutral, estratégico y con pensamiento de negocio puede ser un gran diferenciador entre la informalidad y la profesionalización.
4. Gestión de la reputación
Todos, absolutamente todos los públicos importan, gestionar y conocer lo que las personas sienten acerca de tu marca es tan importante como la rentabilidad de tu negocio. Esto permitirá generar algo más valioso: credibilidad y respeto.
5. Brinda una nueva realidad
Las personas cambiaron y por consiguiente, el mundo también. Las épocas de crear marcas que “resuelvan necesidades” quedó atrás para dar paso a nuevos jugadores que no solo busquen el bienestar propio, sino que sean empresas que brinden nuevas y mejores realidades, perspectivas, valores, propósitos y conexiones a sus audiencias.
6. Marcas líderes
Las empresas están hechas de personas para personas, ¿cierto? Entonces resulta un misterio saber por qué éstas dejaban de lado al elemento más importante para crear una estrategia efectiva: El ser humano. Ser marcas humanas en un mundo lleno de incertidumbre no solo brinda estabilidad y seguridad para las personas que las consumen, sino que se convierten en negocios preocupados por todos los públicos que benefician lo ético a lo estético.