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Impuestos, poco utilizados para impulsar la sustentabilidad
Funcionarían como herramienta para el desarrollo del país: KPMG
Funcionarían como herramienta para el desarrollo del país: KPMG
México es uno de los países menos activos en el uso de impuestos como herramienta para impulsar el comportamiento empresarial sustentable y alcanzar los objetivos de una política verde.
Así lo revela el índice KPMG de impuesto ecológico, en el cual muestra que nuestro país ocupa el penúltimo lugar. Este indicador está compuesto por 21 países. La última posición la tiene Rusia y después se encuentra México.
Estados Unidos se coloca en primer lugar por su extenso programa de incentivos fiscales de carácter por eficiencia energética, renovable y sus edificios ecológicos.
De acuerdo con el indicador realizado por KPMG International, red global de firmas profesionales que provee servicios de auditoría, impuestos y asesoría, Japón, Reino Unido, Francia, Corea del Sur y China también se destacan porque usan sus sistemas tributarios para responder a los retos globales, incluyendo seguridad energética, escasez de agua y recursos, contaminación y cambio climático.
Respecto del caso de nuestro sistema fiscal, el socio de la práctica de impuestos corporativos de KPMG en México, Gabriel Andrade, expresó que el impuesto ecológico puede y debe ser una herramienta importante para el gobierno con la que de impulse una agenda energética y de sustentabilidad que permita coadyuvar al crecimiento de infraestructura nacional y establecer la plataforma de desarrollo para los siguientes años.
En tanto que para Miguel Ángel Temblador, socio de impuestos corporativos de la firma, los análisis que actualmente se están llevando a cabo en materia de leyes –energética, fiscal-, en un futuro generarán la aplicación de menores recursos públicos utilizados para contrarrestar los efectos de contaminación, recolección de agua, derivando en más beneficios para generar cultura e inversión verde en México.
Refirió que muchos gobiernos también recurren a otros incentivos, como subsidios y préstamos en condiciones favorables, para influenciar el comportamiento empresarial.
En el caso del índice, mencionó que se destacan notables ejemplos de dichos instrumentos, pero no los califica individualmente debido a la inestabilidad de estos programas.
Gabriel Andrade destacó que en este análisis se encontró que desde enero del 2011 se han introducido al menos 30 nuevos incentivos, penalizaciones e importantes cambios regulatorios en torno del impuesto ecológico en los países objeto del indicador.