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Regreso a clases. Consumidores ven en pequeños negocios un aliado
Por la derrama económica del reinicio de clases presenciales, a nivel nacional se puede calcular en 100,000 millones de pesos
Después de dos años de modificaciones en los modelos escolares, algunos de forma híbrida o totalmente virtual, el 29 de agosto más de 25 millones de niños y adolescentes regresarán a la escuela de forma presencial, lo que representa una oportunidad de reactivación completa para los más de 1 millón y medio de pequeños negocios en el país que dan servicios al sistema educativo, indica ConComercio Pequeño.
“El regreso representa la gran oportunidad de reiniciar la esperada reactivación de sus negocios, por la derrama económica que esperamos en el reinicio de clases presenciales, que a nivel nacional la podemos calcular conservadoramente en cerca de 100,000 millones de pesos”, menciona Gerardo Cleto López Becerra, presidente de ConComercioPequeño.
Explica que parte de estos negocios relacionados como papelerías, librerías, tiendas de uniformes, venta de mochilas, transporte escolar, cooperativas escolares, talleres de tareas, cafés internet, equipos deportivos, escolares o servicios financieros educativos, son los que mayores beneficios tendrán, después de dos años de crisis en la que cambie, muchos no lograron sobrevivir.
Otros negocios beneficiados son las tiendas de abarrotes, peluquerías y estéticas, zapaterías, transporte de pasajeros (taxis y colectivos), y de preparación de alimentos y bebidas.
Tan solo la Ciudad de México, estima una derrama económica de más de 4,000 millones de pesos derivada del movimiento que se genera en el sistema educativo escolar como transporte y demás negocios involucrados.
El reto de la inflación
Si bien este inicio del ciclo escolar representa un respiro para los negocios, hay retos que vencer, siendo el principal la inflación que está cobrando estragos en el bolsillo de los padres de familia.
Cleto López señala que hace tres años, el paquete de artículos básico estaba hasta en 150 pesos, cuando hoy no baja de los 200 pesos, un incremento del 30% que difícilmente los padres pueden financiar.
Dicho paquete se conforma de cinco cuadernos profesionales económicos, plumas y lápices, goma, sacapuntas, caja de colores, juego de reglas, lápiz adhesivo, papel y plástico para forrar. A esto hay que sumar uniformes, mochilas, libros y otros elementos como cubre bocas y gel antibacterial, que sigue siendo norma de las escuelas para poder asistir.
Aunque la situación es complicada, también representa una oportunidad para los pequeños negocios al buscar opciones accesibles que ofrecer, promociones, opciones de pago (diferidas a meses o con vales, entre otros elementos) y sobre todo, brindar el apoyo que las personas necesitan en este momento.
Esto ya lo ha observado Erica González al comprar los útiles de sus hijos, quien buscando los mejores precios, encontró papelerías que tenían en promoción cuadernos y otros accesorios de temporadas pasadas con la opción de pagar a meses; tiendas de uniformes que hacen descuentos si van en grupo y con diferentes opciones de telas de acuerdo a los presupuestos de las personas y tiendas de libros que comenzaron programas de recompensas, con lo que ha ahorrado y obtenido materiales casi gratis.
“Está bien difícil la cosa, ahorita andamos viendo dónde sale más barato pero también que dure. Las papelerías tienen muchas opciones y la tienda de los uniformes realmente nos salvó porque no nos iba a alcanzar de contado ni con la opcion más costosa. Antes íbamos al centro a surtirnos pero ahorita está bien lleno, ni transporte ni nada y con la pandemia, ni para arriesgarse. La verdad los negocios cerca de casa y otras colonias se están poniendo bien las pilas. Al final no conviene a todos”, dijo en entrevista.
Sobre los costos, ha visto aumentos muy marcados, por ejemplo, una mochila que antes le salía en 200 pesos, ahora la encuentra en 400 o hasta más, todo depende de donde la busque. Su opción será arreglar la de su hijo, que “realmente no está mal, solo una parte se descosió y pues todavía aguanta, solo la llevo con la costurera y listo”, un negocio que también se beneficiará del regreso a clases.