Actividad industrial global desaceleró en el 2023

La producción industrial a nivel global se desaceleró en 2022 y 2023, considerando los primeros 10 meses de cada año, según datos de la Oficina de Análisis de Política Económica (CPB, por su sigla en inglés) de los Países Bajos.

De enero a octubre en cada caso, a tasas anuales, la producción industrial mundial cayó 5.8% en 2020 afectada por la pandemia de Covid-19, para luego recuperarse a 8.6% en 2021.

Pero este indicador cayó a 3.6% en 2022 y después se desplomó a 0.7% en 2023, en la misma comparación.

Antes de la pandemia de Covid-19, la producción industrial mundial experimentaba un crecimiento sostenido desde 2010, con el mejor de los resultados justo en este año, cuando hubo un crecimiento de 8.9% en los 10 primeros meses. Las economías emergentes, en particular, estaban contribuyendo significativamente a esta expansión.

De acuerdo con perspectivas del Foro Económico Mundial (FEM), las secuelas de la pandemia de Covid-19 y la actual guerra entre Rusia y Ucrania han dejado al descubierto fisuras en sociedades que se ven aún más tensas por agitaciones episódicas. Sin embargo, hasta ahora el sistema global ha demostrado ser sorprendentemente resistente.

El año pasado no se materializó una recesión ampliamente prevista, y las turbulencias financieras se atenuaron rápidamente, pero las perspectivas siguen siendo inciertas.

Para el FEM, los hechos bélicos del 2023 aún no han dado lugar a conflictos regionales más amplios -ni han creado consecuencias desestabilizadoras a nivel mundial como las observadas en el estallido inicial de la guerra en Ucrania o la pandemia de Covid-19-, pero sus perspectivas a largo plazo podrían traer más conmociones.

roberto.morales@eleconomista.mx