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Apuesta EU por mayor interconexión eléctrica
Estados Unidos tiene la meta de llegar al 2022 con un continente completamente interconectado en términos de electricidad, desde Alaska hasta la Patagonia, incluyendo al Caribe y las islas aledañas a este hemisferio.
Washington, EU. Estados Unidos tiene la meta de llegar al 2022 con un continente completamente interconectado en términos de electricidad, desde Alaska hasta la Patagonia, incluyendo al Caribe y las islas aledañas a este hemisferio.
Para ello, la Oficina de Recursos Energéticos del Departamento de Estado del vecino del norte presentó la iniciativa Connecting the Americas 2022, mediante la cual se llevan a cabo distintas charlas bilaterales enfocadas a iniciar las reconfiguraciones técnicas y regulatorias, así como construcción de infraestructura que permita llevar electricidad a 31 millones de personas adicionales a lo largo del continente en el lapso establecido.
A periodistas del continente, representantes de este organismo gubernamental explicaron que las inversiones para este plan superan los 1,000 millones de dólares, incluyendo los 500 millones que mediante siete fuentes crediticias que incluyen al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y al Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) se han destinado ya a la integración centroamericana.
El primer paso, detallaron, será la implementación del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (SIEPAC), entre Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, Nicaragua y Panamá, que arranca este año con 1,790 kilómetros interconectados en 20 tramos y 40 subestaciones destinadas a soportar una capacidad de 300 megawatts.
De manera simultánea, se reforzará la relación energética entre Estados Unidos y Canadá, que por las condiciones de libre mercado llevan más de dos décadas de interdependencia eléctrica. Los gobiernos de Colombia, Ecuador, Perú y Chile realizarán la integración propia, en espera de que se avance hacia la conexión del cono sur. Hasta el momento, Venezuela y Ecuador no han avalado su participación en la conexión continental, pero sí están dispuestos a integrarse regionalmente, explicaron.
En el caso de México, los representantes del gobierno estadounidense aseguraron que el país ha brindado su apoyo a la iniciativa, manteniéndose activo en proyectos como el que Sempra lleva a cabo entre Baja California y California; sin embargo, la regulación posterior a la reforma energética será determinante, en términos de participación de jugadores del sector eléctrico.
Las inversiones dependerán de lo que cada región en particular necesita, por ejemplo, en Estados Unidos estamos muy avanzados, pero habrá otras regiones geográficamente complicadas o remotas, en las que se necesitará acceso según sus condiciones especiales , aseveró la representación estadounidense.
BRASIL PONE EJEMPLO EN BIOCOMBUSTIBLES
El proyecto Connecting the Americas 2022 incluye además otras consideraciones como la disposición de energía eléctrica de respaldo, garantizada por una combinación entre las fuentes renovables de cada país y el acceso a precios competitivos de los combustibles fósiles, para lo cual será necesaria la diversificación de la canasta energética continental, atendiendo a las posibilidades geográficas que cada región puede aportar.
En el caso de Brasil, existe la iniciativa bilateral establecida en el 2007 con Estados Unidos, que plantea asistencia técnica para incrementar la producción mediante biocombustibles en El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica y República Dominicana.
kgarcia@eleconomista.com.mx
