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Construcción registra su caída más pronunciada desde el 2013
El rubro más afectado fue el que comprende las obras relacionadas con el tratamiento de aguas, saneamiento y drenaje, en comparación anual cayó 20.5 por ciento.
En agosto del 2019 el valor total generado por la construcción en México cayó 10.2% en relación con el mismo mes del año previo. Esta caída significó la contracción más pronunciada en casi seis años (septiembre del 2013).
Con este resultado el valor de las obras privadas y públicas en el país liga 13 caídas al hilo, de acuerdo con la Encuesta Mensual sobre Empresas Constructoras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En su análisis inmediato, sólo de julio a agosto el valor de las construcciones cayó 1.5 por ciento. Cada mes del 2019 se ha presentado un resultado peor en comparación con el mes anterior.
El rubro más afectado fue el que comprende las obras relacionadas con el tratamiento de aguas, saneamiento y drenaje, en comparación anual cayó 20.5 por ciento.
Por su parte, el valor de las obras de transporte y urbanización registró una reducción de 10.4% a tasa anual mientras que las obras de electricidad y telecomunicaciones cayeron 8.1% en relación anual.
Las obras de edificación, que comprenden todas las construcciones de edificios habitacionales, industriales o comerciales, registraron una contracción anual de 6.6% en su valor total.
El único rubro que presenta avances significativos es el de las construcciones relacionadas con la extracción y transformación del petróleo. En agosto del 2019 registró un incremento anual de 54.1%, ligando ocho meses con tendencia al alza.
Mercado laboral, en rojos también
Los indicadores laborales dentro de la industria de la construcción también presentan resultados negativos en línea con el bajo dinamismo económico del sector.
En agosto de este año el personal ocupado total fue 4.2% menor de lo que era durante agosto del 2018. Especialmente se redujo el número de empleados dentro de las constructoras; el total de obreros se redujo pero de manera menos pronunciada.
Las remuneraciones totales, que engloban sueldos, salarios y prestaciones sociales, también se deterioraron, con una caída de 1.0 por ciento.