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El Tren Maya recibió 15,518.7 mdp adicionales de presupuesto este año

De esta forma, el presupuesto original de este año (62,942.1 millones de pesos) subió a 78,460.7 millones de pesos, mientras que el proyecto alcanzó un avance físico total del 43.8% (al cierre del primer trimestre fue de 28.3%).

El Tren Maya recibió durante el primer semestre del año una inyección de 15,518.7 millones de pesos, 24% más de los 62,942.1 millones de pesos que se le habían presupuestado, lo anterior en plena transición de la austeridad a la pobreza franciscana en el ejercicio del gasto público federal.

De acuerdo con los Informes sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública, de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la principal obra de infraestructura alcanzó un avance físico total del 43.8% (al cierre del primer trimestre fue del 28.3%), a pesar de que en el último trimestre se han registrado diversas anomalías jurídicas en los dos subtramos que se dividió el tramo 5.

A la fecha, de los 78,460.3 millones de pesos que se tienen de presupuesto este año para avanzar los primeros cinco tramos del Tren Maya, principal obra de infraestructura del sexenio, se ha ejercido el 65% de los recursos, toda vez que se trabaja a todo vapor para inaugurarlo en diciembre del 2023.

En diversas ocasiones el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha señalado su interés de que regresen los trenes de pasajeros al país y el que se construye tendrá también vocación turística y de carga. Incluso ha realizado diversas visitas de trabajo en las zonas de labores para mirar directamente los avances (como lo hizo el pasado fin de semana).

Con base en la información publicada el viernes  por la SHCP, también se puede saber que el tren mantiene su monto de inversión de 167,341.6 millones de pesos, muy por debajo de los hasta 400,000 millones de pesos que mencionó el Presidente de México la semana pasada en una de sus conferencias mañaneras.

Obra de seguridad nacional

En un hecho inédito en el desarrollo de obra pública, y para no posponer más las obras en el tramo 5 sur del tren, el gobierno federal hizo valer el mes pasado una declaratoria de seguridad nacional ante la suspensión de un juez en dicho segmento.

Además, el gobierno federal informó que dicho tramo que había ganado en licitación pública un consorcio liderado por dos filiales de Grupo México, está ahora a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y que se dividió en tres subtramos que fueron asignados directamente a tres consorcios que ya participan en la obra (dirigidos por Mota Engil México, Azvi e ICA), por lo que no se requirió de los servicios de la división de infraestructura de Grupo Carso, que también están construyendo el tren.

La Sedena también tendrá a su cargo la construcción de los tramos 5 norte, 6 y 7. Sobre los cambios de mando en los trabajos del Tren Maya, el director ejecutivo de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, dijo: Desde el aeropuerto de Texcoco, el gobierno federal, con distintos colores y siglas, ha abusado de la figura de seguridad nacional tanto para clasificar la información como reservada (y ocultarla) como para justificar cambios en los procedimientos administrativos como los de protección ambiental o las consultas a la población.

Consultado por El Economista, el especialista agregó que, paradójicamente, el partido Morena, siendo oposición defendió esos derechos en Atenco y otros proyectos de infraestructura, pero ahora, como gobierno, utiliza los mismos recursos para evitar la transparencia o cumplir con la legislación en materia ambiental o de derechos humanos.

alejandro.delarosa@eleconomista.mx

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