Lectura 5:00 min
El coworking ya no es emergente, ahora lo miran las grandes empresas
Julio Alberto Rodríguez, CEO de BBC Offices, habla acerca de los retos que ha superado este modelo de negocio y los que afrontarán el siguiente año.
El coworking está en crecimiento, afirma seguro Julio Alberto Rodríguez Nolasco, director ejecutivo y fundador de BBC Offices. “Dejó de ser algo nuevo, emergente, está pasando también de ser una tendencia a convertirse en un modelo de negocio en repunte”, agrega.
Los grandes corporativos cada vez están recurriendo más a los espacios de trabajo conjuntos, cuenta en entrevista. “Representan 35% de nuestros clientes y el resto, 65%, son pequeñas empresas. Pero las estadísticas nos indican que estos porcentajes se irán igualando”, detalla.
Hace unos años, “la gente pensaba que esto sólo funcionaba para quienes no podían pagar una oficina, pero ahora las empresas están queriendo trabajar en estos centros. Ya les quitamos la idea de que son lugares informales o con poca seriedad”, explica. También era común relacionarlo con empresas virtuales, “ya están dándose cuenta de que no sólo es para ellas”.
Además de desmontar esos mitos, las grandes compañías “ya se sienten cómodas de trabajar con nosotros porque les representa ahorro”. Algunas han crecido tanto que ya no tienen más oficinas para sus colaboradores. Entonces, en lugar de rentar un edificio y gastar en adaptarlo y administrarlo, optan por los centros de coworking.
“Esto reduce costos de operación. Somos una opción barata y pueden acceder a contratos flexibles, desde un mes”, agrega.
La otra razón por la que empresas como Coca-Cola se han animado a contratar espacios de coworking, explica Rodríguez Nolasco, “es porque ya se tienen mejores instalaciones, quienes nos dedicamos a esto le hemos metido mucho a la tecnología. En BBC tenemos Internet con conexión E1, con capacidad para hacer conferencias vía remota con la mejor calidad”.
El empresario asegura que la cultura y el ambiente de trabajo en ese tipo de centros han influido de manera positiva para que más clientes quieran trabajar en lugares como ese. “En cualquier corporativo de primer nivel, los directores ya no ocupan oficinas alejadas, medio piso sólo para ellos. Hoy todos colaboran en espacios abiertos”.
Además de fomentar lo anterior, en BBC Offices, dice, realizan conferencias con todos los asociados para que puedan conocerse y ponerse en contacto. El resultado es que 40% de sus clientes ha hecho negocios entre ellos. “Los empresarios sienten más seguridad tener a la mano a su abogado, a quien les lleva la publicidad o las relaciones públicas. Y a nosotros nos ayuda a que nuestros usuarios se queden más tiempo con nosotros”.
Cuentan con cinco ubicaciones en Polanco, Ciudad de México. En todos tienen disponibles los servicios de business center, “que son otro atractivo”, señala. Se trata de salas de juntas y de conferencias, áreas para impartir capacitación, funciones que necesitan los corporativos, explica. A esto se suman áreas comunes de trabajo y terrazas para que las empresas realicen sus eventos.
El coworking incluye 30 horas mensuales de acceso a áreas comunes, línea telefónica en áreas comunes, conexión a Internet de alta velocidad, vigilancia y circuito cerrado, y café, azúcar y crema ilimitados.
En su página de Internet han incluido un botón para cotizar los precios, dependiendo de las necesidades, como oficina equipada, virtual básica o virtual profesional, coworking, salas de juntas o salas de capacitación.
De cara a la recesión
Las industrias creativas están generando un impacto económico, ha señalado el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). En ese sector incluye a las incubadoras, aceleradoras y espacios de coworking. Sin embargo, “la falta de información dificulta saber cuántas empresas están siendo incubadas, qué tipo de emprendimientos creativos están siendo acelerados y cuántos de éstos son incorporados a los mercados globales”.
Por ello, en el 2017 lanzó una convocatoria dirigida a esas empresas a inscribirse a un directorio que el BID ha ido construyendo. La iniciativa “estará enfocada también en conocer por qué ciertos emprendimientos fracasan mientras que otros son exitosos”.
En América Latina, México es el país con más coworking, afirma Julio Alberto Rodríguez. Le siguen Brasil, en segundo lugar, y Colombia, en tercero. Sin embargo, “la recesión económica nos va a impactar, no creo que nadie se salve”. En BBC Offices ya prevén un estancamiento para el próximo año.
Para blindarse lo más que puedan, se preparan con diferentes estrategias. Una de ellas será intentar adaptar su modelo de negocio a la economía, acotar gastos y bajar o mantener las tarifas. Aún analizan en qué porcentaje podrían reducirlas o cuánto tiempo podrían mantener las actuales.
Actualmente, “lo que nos diferencia, en esta zona de Polanco, que es una de las más caras del país, es que somos el coworking más económico y con los servicios de más alto nivel. Eso lo estamos absorbiendo nosotros”.
El otro punto del plan será llegar no sólo a las grandes empresas, sino a los gobiernos. Actualmente, los funcionarios utilizan esos espacios para conferencias o capacitación. “Pero todavía no nos tienen en la mira como una opción para tener un centro de trabajo”.
Así que a partir del 2020, propondrán a las administraciones estatales tener una representación en la Ciudad de México, utilizando las oficinas de coworking. “Este concepto les queda que ni mandado a hacer”, dice muy convencido.
El coworking está creciendo, recapitula. “Pero nos tenemos que innovar, buscar otros clientes y armarnos de más y mejor tecnología”.
blanca.juarez@eleconomista.mx