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El gigante de ropa, Inditex, vuelve a los resultados prepandemia en el primer semestre del 2021
En los seis primeros meses de su ejercicio, que va del 1 de febrero al 31 de julio, el grupo español registró un beneficio neto de 1,272 millones de euros (1,500 millones de dólares), frente a las pérdidas de 195 millones (230 millones de dólares) del mismo periodo del año anterior, informó este miércoles en un comunicado.
La gran empresa española textil Inditex, propietaria de Zara, Bershka y otras líneas, pasó página de la pandemia en el primer semestre con unos beneficios próximos a los de antes de la crisis, impulsada por el regreso de la clientela y el crecimiento de las ventas en internet.
En los seis primeros meses de su ejercicio, que va del 1 de febrero al 31 de julio, el grupo español registró un beneficio neto de 1,272 millones de euros (1,500 millones de dólares), frente a las pérdidas de 195 millones (230 millones de dólares) del mismo periodo del año anterior, informó este miércoles en un comunicado.
La facturación del grupo textil alcanzó los 11,936 millones de euros (14,087 millones de dólares), un 49% más que el año anterior, gracias al regreso de los clientes a las tiendas y al fuerte aumento de las ventas online.
"La recuperación sigue acelerándose", dijo el presidente de Inditex, Pablo Isla, en una conferencia telefónica, asegurando que el grupo había vuelto a su nivel de actividad anterior a la crisis sanitaria.
Las ventas solo en el segundo trimestre fueron superiores a las del segundo trimestre de 2019, antes de la pandemia de Covid-19.
El grupo se había hundido en números rojos en el primer semestre de 2020, por primera vez en casi veinte años, tras tener que cerrar casi el 90% de sus tiendas en todo el mundo debido a la epidemia.
Desde entonces ha dado un giro a la situación, ayudado por la recuperación económica.
En la Bolsa de Madrid, el valor bajaba ligeramente a las 08h45 GMT, perdiendo un 1.16% en un mercado que bajaba un 0.38 por ciento.
Más del 25% de las ventas serán en línea en 2021
Según Inditex, la reactivación de la actividad se ha traducido en un aumento de las ventas de todas las marcas del grupo (Bershka, Pull&Bear, Massimo Duti, etc.), pero es especialmente acentuada en el caso de Zara, cuya facturación ha aumentado un 53% en un año.
Las perspectivas también son alentadoras para los próximos meses, ya que "casi todas las tiendas del grupo" están ya "abiertas", según Pablo Isla.
Según el grupo, las ventas en tienda y en línea entre el 1 de agosto y el 9 de septiembre de 2021 aumentaron un 22% a tipos de cambio constantes en términos interanuales y un 9% en comparación con el mismo periodo de 2019.
"Las ventas por internet siguen creciendo a un ritmo elevado", señala Inditex.
Así, las ventas digitales crecieron un 36% respecto al primer semestre de 2020 y un 137% respecto al mismo periodo de 2019. Inditex espera que la venta online supere el 25% de la venta total en el ejercicio 2021.
La pandemia llevó a la empresa a acelerar la reorganización de sus tiendas, cerrando las más pequeñas para concentrarse en grandes superficies situadas en las arterias más prestigiosas de las grandes ciudades.
A finales de julio, Inditex contaba con 6,654 tiendas en todo el mundo, 683 menos que hace un año y 175 menos que a principios de año.
Los grandes grupos textiles se han visto muy afectados por las restricciones ligadas a la crisis sanitaria: la sueca H&M vio sus beneficios netos reducirse un 90% en 2020, mientras que la japonesa Fast Retailing (Uniqlo) sufrió una caída del 44% en sus ganancias en 2019-2020.
Estos dos grupos, competidores directos de Inditex en el sector de la moda de bajo coste, también han conseguido enderezar el rumbo en los últimos meses, pero en menor medida que el grupo español.