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IEPS no redujo ingesta calórica
Según la ANPRAC, los mexicanos bajaron menos de un tercio de punto porcentual su consumo de calorías con los refrescos más caros.
El impuesto de 1 peso por litro a refrescos, que entró en vigor el año pasado, tuvo un efecto mínimo en la ingesta calórica de la población, pues de las 3,024 calorías diarias per cápita de los mexicanos, solamente se registró una disminución de 6.2 calorías en el 2014, informó la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC).
Por el contrario, el IEPS a las bebidas saborizadas ocasionó la pérdida de más de 1,700 empleos directos y frenó a inversiones en infraestructura por parte de la industria refresquera mexicana.
Se trata de un impuesto regresivo que más que una medida de salud para combatir la obesidad fue una mera medida recaudatoria , opinó el nuevo director general de la ANPRAC, Jorge Terrazas Ornelas.
En conferencia con medios, el directivo criticó que los 17,000 millones de pesos que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) recaudó en el 2014 por el IEPS a refrescos no se han aplicado en acciones para la prevención de la obesidad, ni para la instalación de bebederos en escuelas.
Agregó que el año pasado se registró una caída en volumen de ventas de refresco de 2.5 por ciento. Sin embargo, para este año esperan una estabilización de la industria, pudiendo incluso recuperar la tasa anual de crecimiento de 1% que venían registrando anteriormente.
Además, enfatizó que los hogares de nivel socioeconómico bajo fueron los que más resintieron este impuesto, pues de acuerdo con cálculos de la ANPRAC, 63.7% de la recaudación provino de éstos.
Sobre el incremento a 2 pesos por litro a refrescos que proponen algunas ONG para el siguiente ejercicio fiscal, la ANPRAC rechazó esta medida argumentando que afectará aún más los empleos e inversiones de esta industria.
ONG cuestiona resultados
Recientemente, la asociación civil El Poder del Consumidor presentó los resultados preliminares del estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y el Centro de Población de Carolina del Norte, que analizó a los hogares de 53 ciudades de México con al menos 50,000 habitantes.
Con base en este estudio, el consumo de bebidas azucaradas en México tuvo una caída promedio de 6% durante el 2014, llegando a 12% en diciembre.
Al respecto de las declaraciones y cifras dadas a conocer este martes por la ANPRAC, Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, comentó en entrevista que desde que se anunció el nuevo impuesto a bebidas saborizadas, la industria refresquera se pronunció en contra justificando que se eliminarían empleos.
Ellos (los refresqueros) ahora salen y dicen que bajó muy poco el consumo de refrescos, pero que sí se perdieron miles de empleos. Yo lo que creo es que más bien esta industria pudo haber tomado el impuesto como una justificación para reducir personal, pues si bajó tan poco la venta de refrescos como ellos aseguran, es contradictorio que se eliminaran tantos empleos , consideró Calvillo.
