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La inversión a 5G se perfila insostenible para los operadores, advierte Ericsson
El fabricante Ericsson de infraestructura para telecomunicaciones reconoce que la inversión al desarrollo de redes celulares de 5G es todavía incipiente e, en algunos casos, insostenible para las compañías prestadoras del servicio al público masivo.
Ericsson registró una pérdida neta de 2,292 millones de euros para su ejercicio del año 2023, en contraste con una ganancia neta de 1,677 millones de euros anotados en 2022 y el también beneficio neto de 2,167 millones de euros de 2021.
En el año, Ericsson ingresó 23,125 millones de euros por todas sus operaciones globales, un 3% menos dinero que en 2022. El registro de ese año también contabiliza un contrato por 14,000 millones de dólares firmado en diciembre de 2023 con AT&T para tener lista una red de capacidad abierta al año 2026, y que entonces tiró 9% el valor de las acciones del competidor Nokia.
El resultado neto de Ericsson para 2023 se atribuye a una revisión de los operadores a sus planes de inversión en el desarrollo de redes celulares de quinta generación (5G), y todavía por efectos de la compraventa del proveedor estadounidense de servicios de nube Vonage que Ericsson adquirió entre 2021 y 2022 por 6,200 millones de dólares.
Ericsson, que junto con Nokia y Huawei es uno de los tres principales proveedores mundiales de infraestructura física y digital para telecomunicaciones, previó un año 2024 difícil para los fabricantes por una cautela de los clientes en los despliegues de 5G, a pesar de un aumento en el tráfico que cursa por las redes celulares y por la posibilidad de nuevos negocios de valor agregado que debieran robustecer las inversiones hacia esa nueva tecnología.
“La industria de las redes móviles sigue siendo un desafío. Esperamos que la incertidumbre del mercado prevalezca en 2024 con una nueva caída del mercado RAN fuera de China, a medida que nuestros clientes se mantengan cautelosos y el ritmo de inversión se esté normalizando en la India”, dijo Ericsson.
El tráfico de datos y la cobertura de la tecnología de quinta generación alcanza ya al 40% de la población mundial y el año 2023 inició con 1,000 millones de conexiones a 5G. En México, había 6.6 millones de esos accesos móviles en noviembre pasado, pero el mercado potencial en el segmento móvil es de 130 millones de líneas celulares, más diversas verticales del sector productivo.
El reto, reconoce Ericsson, es el retorno de la inversión a infraestructura, a través de la conformación de planes de servicio de valor agregado para el consumo masivo y para las industrias con alta monetización.
Los niveles de inversión actuales son insosteniblemente bajos para muchos operadores. Confiamos en que debería materializarse una recuperación del mercado. Pero, el momento de la recuperación está, en última instancia, en manos de nuestros clientes”.
La redefinición de los planes de inversión de los operadores impacto de distinta manera las colocaciones de ventas de Ericsson en 2023, indicó la compañía.
Por ejemplo, el negocio de redes se retrajo 11%, hasta ubicarse en 15,051 millones de euros. Por su parte, el negocio de nube y servicios facturó 5,515 millones de euros, un 5% más que el año previo, en tanto que el de soluciones para empresas creció 76%, hasta los 2,257 millones de euros.
“Nuestro pilar estratégico es potenciar nuestro liderazgo en redes móviles. El liderazgo tecnológico permite a los clientes crear redes abiertas, programables y de alto rendimiento. Nuestro objetivo es crear nuevas oportunidades de monetización para nuestros clientes”, dijo Ericsson.