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Mejor salario solidario a trabajadores e incentivos a empresas, que proferir amenazas: Armando Leñero
En la reactivación económica un factor importante es el consumo y este bajará más entre más gente desempleada haya, plantea el presidente del Centro de Estudios para la Promoción y Difusión del Empleo Formal, Armando Leñero.
Iniciativas para transferir apoyos monetarios a los trabajadores deben apoyarse porque de esa forma se mantienen las fuentes de trabajo, necesarias para reactivar la economía, consideró el presidente del Centro de Estudios para la Promoción y Difusión del Empleo Formal (CEEF), Armando Leñero.
En entrevista, expuso que, de las propuestas en ese sentido presentadas hasta ahora, la de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de "Salario Solidario" es la mejor.
Explicó que esa en particular debe atenderse porque se trata de una forma adecuada de colaboración entre el gobierno y los empresarios para pagar los salarios de los trabajadores en un momento de emergencia como el que vivimos.
En ese esquema, añadió, al menos los trabajadores que ganan entre uno y tres salarios mínimos no verían una reducción significativa en sus ingresos, además de que mantendrían su fuente de trabajo.
Destacó que una de las virtudes de este planteamiento es que se apoyaría a los trabajadores que tienen el beneficio de contar con el Seguro Social, lo cual resulta crucial en una emergencia sanitaria como la que enfrentamos.
Dijo que para proteger el empleo es necesario dar incentivos temporales a las empresas, no amenazarlas. "Subsidios y apoyos temporales es lo que se debe de hacer".
Explicó que el objetivo es propiciar un descenso en sus gastos fijos, mediante la condonación temporal de aportaciones al IMSS y el Infonavit y darle créditos para que puedan hacer frente a sus compromisos financieros como bajar la nómina. De esa manera se evitará que haya quiebras.
Por otra parte, recalcó que conservar el empleo es muy importante, no sólo porque eso implica que las personas no dejen de tener ingresos, sino porque implica gastos de liquidación para las empresas y en caso de recuperarse y quieran crecer tendrán que realizar inversiones que ya hicieron en capacitación de personal.
Consideró que, en la reactivación económica, un factor importante es el consumo y este bajará más entre más gente desempleada haya.
"Al no haber consumo, se deja de generar empleo". A eso hay que añadir la implicación que trae en los ingresos fiscales el cierre de empresas, añadió.
La pandemia llegó cuando no se generaban empleos suficientes
El presidente del CEEF recordó que la pandemia llegó al país en un momento en el que la generación de empleos venía creciendo a un ritmo menor que en otros años, debido a que la economía no creció en 2019.
Luego, hasta febrero de 2020 se habían generado cerca de 60,000 empleos lo cual es una cantidad mínima si se considera que en México se necesitan entre un millón y un millón 200,000 empleos al año.
Lo grave, abundó, es que no había programas públicos que sustentaran el crecimiento del empleo. "Las políticas del gobierno federal se estaban enfocando en las becas a los jóvenes, lo cual no constituye un empleo. No ha habido un apoyo fuerte a la generación de empleo formal".
Dijo que, si no se toman las medidas necesarias para propiciar la protección del empleo, al final del año vamos a registrar la pérdida de entre 800,000 y un millón de empleos formales registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Eso quiere decir que vamos a tener registrados en el IMSS sólo alrededor de 19 millones 800,000 empleos.
Recordó que alrededor de 75% del empleo en México lo generan las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), lo cual quiere decir que proteger el empleo implica apoyar a esas empresas para que no quiebren y se mantenga las fuentes laborales.