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México avanza en el camino de la transformación energética
Empresas y fondos mexicanos priorizan criterios ESG, adoptando prácticas sostenibles y éticas en sus operaciones para enfrentar desafíos.
Propuesta. Las compañías deben priorizar proyectos de compensación de huella de carbono, asegura STRIVE by STX. Foto: STX group.
En México, se está experimentando un rápido aumento en la demanda de certificados de energía renovable (CEL) y otros instrumentos de acción ambiental, señalando un creciente interés en commodities medioambientales. Como una de las pocas empresas autorizadas para negociar CEL en el país, STX Group ve un enorme impacto potencial en la transición energética, especialmente considerando que la regulación exige a los participantes alcanzar al menos un 13.9% de su consumo energético anual mediante estos instrumentos, con previsiones de aumento en los próximos años.
A pesar de este impulso hacia las energías renovables, aproximadamente el 60% de la generación eléctrica anual en México aún proviene de fuentes fósiles. El desafío se complica con el aumento proyectado en la capacidad instalada anual de Generación Distribuida, según el Programa del Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen) 2022-2036.
STX Group ha adoptado una estrategia a largo plazo en un momento en que otras empresas del sector energético desinvierten activos. En cinco años, la empresa ha experimentado un crecimiento explosivo en su negocio de certificados de energía renovable, destacó Marc Falguera, Co-Director de STRIVE by STX.
En cuanto a las finanzas climáticas en el sector energético mexicano, la adopción de criterios ESG presenta beneficios socioeconómicos, fomenta la responsabilidad corporativa y mitiga riesgos ambientales. Las empresas que incorporan estos criterios no sólo contribuyen a desafíos sociales y ambientales, sino que también atraen inversores comprometidos con la sostenibilidad, fortalecen relaciones locales y contribuyen al desarrollo socioeconómico inclusivo.
La respuesta de las empresas mexicanas a la presión de inversores y regulaciones para adoptar prácticas más sostenibles es variada. La conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad está creciendo, pero la adopción de prácticas ESG varía entre empresas y sectores. La descarbonización se presenta como una estrategia de negocio sensata, no sólo por cumplir con regulaciones, sino para ganar ventajas en un mercado cambiante y exigente, agregó Marc Falguera.
A pesar de los avances, México enfrenta desafíos financieros en su transición hacia una matriz energética más sostenible. Aunque es un líder en la transición energética en Latinoamérica, debe abordar problemas de seguridad, energía, infraestructura y tecnologías de la información para alcanzar su verdadero potencial.
En el contexto de la transición energética, los instrumentos financieros y mecanismos de inversión están ganando relevancia. Las entidades financieras ofrecen recursos para acelerar la transición energética, brindando a las empresas oportunidades de acceso a financiación, ventajas competitivas y una mejor gestión de riesgos. La colaboración entre instituciones financieras y empresas es crucial para impulsar el desarrollo sostenible en el sector energético.
México, con su potencial industrial y papel en cadenas de suministro globales, tiene un impacto significativo en el desempeño medioambiental de multinacionales. La industria manufacturera, especialmente la automotriz, está integrando objetivos de neutralidad en el alcance 2, afectando a toda la cadena de suministro. Las industrias intensivas como la siderurgia y la producción cementera enfrentan desafíos de reducción de emisiones con la entrada en vigor del Sistema de Comercio de Emisiones en México y el CBAM.
