México, clave en la estrategia de Braskem

Sao Paulo, Brasil. Carlos Fadigas, CEO de Braskem, tiene claro su objetivo de que a más tardar en el 2020 serán la tercera empresa petroquímica más grande del mundo y el papel que va a jugar al respecto el complejo en México es clave, porque los pone a la altura de las empresas estadounidenses que están creciendo en la costa del Golfo de México, o con las de Canadá.

Incluso, con esta meta en mente se abrirían posibilidades importantes de buscar en el futuro algún tipo de alianza con lo que ahora es Pemex Petroquímica.

Sin embargo, dependen de que la producción de materia prima se incremente tanto para ampliar su producción o buscar agregar masa crítica en la cadena.

No hemos hablado nada con Pemex y no creemos en que se deba de iniciar un diálogo por medio de la prensa, pero es una opción para ambas partes , señala Fadigas.

Hasta ahora van a tiempo y dentro del presupuesto. Se puede pensar en que, una vez operando a 100%, se propongan expansiones que pueden ser de hasta 25%, logradas por medio de descuellamientos y modernizaciones, pero más allá de ese punto se necesitan inversiones mayores, sobre todo en materia prima, ya sea que provenga de Pemex o de nuevos operadores petroleros.

Fadigas reconoce que la reforma energética les abre una serie de oportunidades en el sector, en especial pensando en una competencia global en el futuro, competencia que ya se tiene con los complejos de Shell, Nova Chemical o ExxonMobil.

Pemex no ha hecho suficientes inversiones en los últimos 20 años y el complejo de Braskem en Veracruz es la oportunidad que tiene el país de hacer un relanzamiento serio de su industria, mismo que debe ser acompañado de un esfuerzo mayor en la oferta de materias primas, como el etano, que es el principal detonante del proyecto. Si hay materia prima en el largo plazo se puede pensar en una mayor inversión; sin más etano, es imposible.

Su complejo Etileno XXI va a producir 1 millón 50,000 toneladas de producto. Sin tener que hacer mayores expansiones pueden pasar hasta 1.2 millones, pero más allá de ese esfuerzo ya se necesita tener un proveedor confiable de etano que hoy por hoy no se tiene, explicó.

Fadigas explica que el modelo de crecimiento de Braskem es de agregación. Así empezaron en 1997, y han ido sumando los esfuerzos de empresas más pequeñas en una sola compañía que tiene a dos socios principales: Petrobras y Odebrecht, que les permitieron colarse a las 10 empresas más grandes del mundo en el último año. Y ahora con Pemex como un proveedor estratégico pueden aspirar a estar entre las primeras cinco empresas más grandes del mundo.

De ahí que la posibilidad de combinar esfuerzos con Pemex es una idea que agrada mucho hacia el interior de la empresa, que tiene interés en expandir el negocio, que a fines de este año contará con nuevas plantas en Argentina y Brasil.

En el caso de México el proyecto Etileno XXI tendrá una inversión de 4,500 millones de dólares. Este año invertirán en todo el mundo cerca de 1,000 millones de dólares y la mitad de éstos estará en México. Su principal ventaja es que estaría operando en el 2015, hasta tres años antes de que lo hagan sus competidores estadounidenses y canadienses.

El CEO de Braskem, la novena productora de poliestirenos en el mundo, explica que es normal que una reforma energética como la alcanzada en México debe generar resistencias, pero éstas se van a ir resolviendo con el tiempo y con los beneficios que se puedan alcanzar.

UNA BRASILEÑA MUY GLOBAL

• Braskem tiene 36 unidades industriales en todo el mundo.
• Sus ingresos netos son por 19.000 millones de dólares.
• Sus ingresos externos son por 8,100 millones de dólares.
• Presencia comercial en 70 países.
• Está formada por más de 8,000 integrantes.
• Esta formada por Odebrecht, 50.1%, y Petrobras, 47 por ciento.
• Etileno XXI en Veracruz es una inversión por 4,500 millones de dólares.

Seguridad, el gran reto; la capacitación, la ventaja

Porto Alegre, Brasil. EN TORNO al proyecto de Braskem en Coatzacoalcos, la operación, las inversiones y la preparación van de la mano: seguridad en la logística y capacitación de los recursos humanos.

El primer gran reto que se tiene en el nuevo complejo tiene que ver con la seguridad, de la certeza de que los cargamentos van a llegar completos a su destino, a sus compradores y reducir los costos de transporte, dijo Cleantho Leite, director comercial de Braskeem.

La seguridad es un asunto que lo mismo afecta las operaciones en Brasil que en México. La conocen bien en ambos países y requiere ser tratado de manera especial, pero es un asunto que preocupa mucho , añade.

Hay un mercado secundario en donde el producto que es robado termina vendiéndose para manufacturar productos plásticos que llegan al consumidor final por medio del mercado informal. Hay gente para todo, eso lo sabemos .

En México se va a trabajar muy fuerte la logística, uso del ferrocarril lo más posible, justo porque ofrece más seguridad que el transporte carretero; sin embargo, a pesar de ello hay mermas importantes en los cargamentos porque los delincuentes rompen los sellos y se llevan el producto.

En el caso de los recursos humanos, la empresa prefiere conseguir talento local, novato o experimentado, hacerlo a su modo y con sus técnicas y, al final del día, obtener las mayores ganancias posibles derivadas de las ventajas de crear a sus profesionales, dentro de su filosofía y talento.

luis.carriles@eleconomista.mx