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México eleva meta de reducción de GEI
Entre las vías para conseguir el objetivo, el gobierno incluye desde el programa de reforestación Sembrando Vida, hasta el Tren Maya, pasando por estrategias de trabajo remoto.
México elevó su meta de reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) de 22% a 30% para el 2030, con la apuesta de lograr el cumplimiento de la mano de acciones como el programa Sembrando Vida, el Tren Maya e incluso, la implementación del home office.
Los números totales que integran la ambiciosa propuesta del gobierno de México, la cual se presenta en el marco de la Cumbre Climática COP 27, consideran tres pilares conformados por 48 medidas en todos los sectores económicos y que consideran la naturaleza, el transporte bajo en carbono y la regulación y fomento industrial.
Con ello se busca alcanzar una disminución total anual estimada para 2030 de 88.9 millones de toneladas de bióxido de carbono equivalente.
Las tres soluciones planteadas desde la Secretaría de Medio Ambiente se desglosan de la siguiente manera: La primera, vinculada con la naturaleza, es el programa Sembrando Vida que entre 2024-2030 logrará una mitigación de cuatro millones de toneladas de bióxido de carbono anuales para 2030, una vez que esté toda la superficie meta sembrada. El programa contempla más de 1 millón de hectáreas, con más de 1,100 millones de árboles.
A lo anterior, se suman las Áreas Naturales Protegidas, que permitirían mitigar ocho millones de toneladas de bióxido de carbono, y cuyo compromiso de gobierno ya establecía decretar nuevas áreas de protección al pasar de 182 a 190 áreas protegidas.
Tren Maya, en segundo pilar
Las contribuciones determinadas a nivel nacional para reducir las emisiones tienen como parte de la propuesta el Tren Maya, que para el 2030 se espera que contribuya a mitigar 0.4 millones de toneladas de bióxido de carbono equivalente; mientras que con la estrategia de trabajo remoto se plantea sumar a 1 millón de personas al también conocido home office, este hecho ayudaría a disminuir 1 millón de toneladas de bióxido de carbono equivalente.
Estas dos estrategias se suman a las 35 que ya tenía el país “llevamos el compromiso del país de apostar hacia una electromovilidad del transporte para disminución de gases de efecto invernadero”, dijo Agustín Ávila, director del Instituto Nacional Ecología y Cambio Climático, quien forma parte de la delegación que viajó de México a Egipto para participar en la COP 27.
No obstante, la reducción de emisiones de carbono negro -que después del bióxido de carbono es uno de los contaminantes que contribuyen al calentamiento global- se mantiene en 51% en forma no condicionada y 70% condicionada.
Respecto al tercer pilar, relacionada con la regulación y fomento industrial se calcula una mitigación del orden de 27 millones de toneladas de bióxido de carbono equivalente, a través de un programa para la cogeneración y normatividad de la eficiencia energética, así como la Estrategia Nacional de Economía Circular, con el que se reducirían 3.5 millones de toneladas de carbono equivalente para 2030.
Aunque no se tiene la versión final de las metas de México, se sabe que la propuesta que se entregue en los próximos días en la COP 27 contempla las energías limpias (eólica, hidroeléctricas, patios fotovoltaicos) pero “sin contratos sucios”.
Además, por coadyuvar con la mitigación de contaminantes, se suma el Decreto del 2020 que emitió el presidente Andrés Manuel López Obrador, relacionado con la eliminación del uso del glifosato -sustancia química que se usa en herbicidas- este producto ha terminado con polinizadores como la mariposa monarca o, en el sur del país, las abejas.