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Pemex gana operación del mayor hallazgo petrolero privado a la fecha
La petrolera privada se dijo decepcionada por la decisión de la secretaría y no descartó inconformarse legalmente, pues afirma que ha invertido más en el desarrollo de Zama, que debe ser compartido con la petrolera estatal por ubicarse en un bloque contiguo.
La secretaria de Energía, Rocío Nahle, confirmó este lunes que Petróleos Mexicanos (Pemex) será el operador del primer descubrimiento petrolero que un privado ha realizado en México en los últimos 70 años: el campo Zama, luego de que se logró el acuerdo de unificación entre el contratista estadounidense Talos Energy y la petrolera del Estado mexicano, ante lo cual la privada expresó su decepción.
Respecto al aviso de unificación del yacimiento, Nahle explicó que: “ya se entregó, se les hizo del conocimiento a los dos, tanto a Talos como a Pemex, se cumplió todos los requisitos de ley, tardó más de un año la negociación y queda Pemex como operador. Lo que sigue de acuerdo a la ley porque hay toda una serie de requisitos a cumplirse en la ley”, es lo que continuará para que arranque el desarrollo de este campo en aguas someras del Golfo de México.
En tanto, la privada estadounidense publicó en un comunicado que “Talos está muy decepcionada con la repentina decisión de la Secretaría de Energía de adjudicar la operación a Pemex, especialmente a la luz del momento en que se produjo la adjudicación”, aseveró, “Talos ha demostrado consistentemente un compromiso implacable con el desarrollo óptimo del campo, ya que la compañía realizó un estudio completo de Ingeniería y Desarrollo Front End (FEED) y ha presentado a la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) un plan de desarrollo que maximiza el petróleo y recuperación de gas y valor para el pueblo mexicano”.
Para el exconsejero profesional de Pemex, Fluvio Ruiz Alarcón, se tendrá que construir un programa de desarrollo conjunto conforme a la ley y dado que la participación de ambos socios es superior al 40%, lo importante es que se logre tejer una relación de trabajo saludable, que no haya saldos negativos de este proceso que agotó todas las etapas previstas en la ley rumbo al programa de trabajo que presentarán ante la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Y frente al largo proceso de unificación, que aún no concluye, valdrá la pena hacer una revisión serena de todo el proceso y mejorar el procedimiento en este sentido, incluso para las alianzas de Pemex, consideró el analista.
Sin embargo, tecnológicamente no habría nada que cuestionar, Pemex sigue siendo el principal productor en aguas someras, probablemente le implique revisar sus prioridades de inversión, y si comparas empresa a empresa, son de ligas distintas, con todo y sus problemas Pemex es de las 15 integradas más grandes del mundo, mientras Talos es más pequeña, dijo.
Para Pemex es un proyecto más, para Talos es uno de sus principales proyectos y lo importante es que se comprenda que ahora va con un socio operativo, no sólo financiero”, aseguró a El Economista.
Arturo Carranza, analista del sector, explicó que frente a la política de llegar a metas tan altas y las inversiones no alcanzan para mantener esta actividad, valdrá la pena si se puede encontrar otra forma de trabajar, como en este momento, compartiendo riesgos, aunque significa una responsabilidad muy grande para la empresa del Estado.
Además, falta la firma de los acuerdos preliminar y de unificación, para establecer montos de producción y participación de ambos, aunque para Pemex valdría la pena encontrar los mecanismos para que no cayera en Pemex toda la responsabilidad.
“Hoy la situación financiera y operativa de Pemex es sumamente compleja, sus últimos incidentes son un ejemplo del rezago en muchas partes de su negocio que prácticamente pasan inadvertidas y de cara al tamaño y la complejidad de sus retos vale la pena si tiene los recursos para sacarle el mayor provecho a este yacimiento”.
El yacimiento Zama fue el primer descubrimiento de hidrocarburos realizado por un operador distinto a Pemex tras la apertura del sector y se dio gracias a los trabajos realizados por el consorcio liderado por la estadounidense Talos Energy y sus socios Sierra Oil and Gas, posteriormente adquirida por Dea Deutsche Erdoel que a su vez se asoció con Wintershall formando al gigante petrolero Wintershall Dea, y la británica Harbour Oil. Se ubica a 70 kilómetros de Dos Bocas, Tabasco, en la provincia petrolera de las Cuencas del Sureste del Golfo de México.
