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Pérdidas de la CFE disminuyeron 68% en tercer trimestre
En dicho periodo de este 2021, la estatal tuvo ingresos totales por 148,851 millones de pesos, mismos que implicaron un aumento anual de 7.2% frente a mismo cuarto del año pasado.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) reportó una pérdida neta por 14,780 millones de pesos durante el tercer trimestre del año, monto inferior a los 46,127 millones de pesos perdidos durante el mismo periodo del 2020.
En su reporte a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la empresa dirigida por Manuel Bartlett puntualizó que en los primeros nueve meses del año, las pérdidas han disminuido, ya que ascienden a 28,853 millones de pesos, esta cifra es 79.8% inferior a las observadas en el mismo lapso del 2020, cuando la CFE reportó pérdidas por 142,908 millones de pesos.
Los ingresos de la CFE se ubicaron en 148,851 millones de pesos durante el tercer trimestre del año, lo que significó un incremento de 7.2% respecto al tercer cuarto de 2020.
Entre enero y septiembre, los ingresos de la empresa productiva del Estado se ubicaron en 434,814 millones de pesos, lo que representó un alza anual de 12.5 por ciento. En el tercer trimestre se registró un riesgo de déficit de capacidad de generación en las centrales eléctricas en México como consecuencia del congelamiento de infraestructura de gas natural y de generación eléctrica en Texas, lo que generó que el precio del gas natural sufriera un incremento inicial de 4.5 dólares por gigajoule a 11 dólares por gigajoule entre el 11 al 12 de febrero de 2021, mientras que dos días después se registró un incremento de hasta 150 dólares por unidad.
“Esta contingencia significó un costo económico importante para la CFE derivado principalmente de la adquisición de gas para la generación de energía eléctrica de centrales de Productores Independientes de Energía y la mitigación de ofertas en el Mercado Eléctrico Mayorista por la participación de centrales de la CFE”, apuntó la empresa.
Pérdida acumulada
La CFE cerró el tercer trimestre del año con una pérdida neta de 28,853 millones de pesos, derivado del aumento en el precio de los combustibles para generación que utilizó, aunque en contraste con el resultado acumulado del año anterior, que fue de una pérdida neta de 142,908 millones de pesos, mostró una mejoría importante.
La estatal eléctrica tuvo ingresos totales de 434,814 millones de pesos, mismos que implicaron un aumento de 12.4% en comparación con el mismo periodo del 2020.
A la vez, según su reporte a inversionistas, su costo de ventas aumentó a 408,060 millones de pesos, 14% más que el año pasado.
Según su análisis presentado a la Bolsa Mexicana de Valores, registró un ligero incremento neto en el volumen de energía eléctrica de 3,246 millones de pesos, que se debió principalmente en el sector Industrial y sector doméstico. Adicionalmente se tuvo un aumento de un millón de clientes.
También tuvo incrementos en sus ingresos por venta de combustibles, "derivado del aumento de operaciones con algunos clientes terceros de las filiales en el 2021 en el consumo de gas natural, adicionalmente se muestra un incremento de precios en el mes de febrero 2021 el cual afectó directamente al precio de venta de combustibles a terceros".
La variación en el rubro de los energéticos se debió principalmente al frente frío No. 35, así como el congelamiento de ductos y el cierre de plantas de producción de gas natural en el estado de Texas, en el país vecino del norte. Esta contingencia significó un costo económico importante para la CFE derivado principalmente de la adquisición de gas para la generación de energía eléctrica de centrales de Productores Independientes de Energía y la mitigación de ofertas en el Mercado Eléctrico Mayorista por la participación de centrales de la CFE.
Finalmente, al cierre de septiembre 2021 se tiene una pérdida cambiaría acumulada de 6,617 millones de pesos, luego de las ventas de combustible en dólares ya que el tipo de cambio al cierre de septiembre 2021 se ubicó en 20.30 pesos por dólar y al cierre de septiembre de 2020 fue de 22.46 pesos.
Mediante la implementación de la Estrategia de Coberturas de riesgos financieros y de los insumos de producción, mantiene y fortalece su política para reducir los riesgos financieros de la deuda directa.
