Buscar
Empresas

Lectura 3:00 min

Proyecto de parque eólico genera inconformidades

Ejidatarios del municipio de Esperanza están divididos en torno a la planta de energía eólica que el Grupo PI Mabe y la firma española Iberdrola pretenden construir.

Puebla, Pue. Ejidatarios del municipio de Esperanza están divididos en torno a la planta de energía eólica que el Grupo PI Mabe y la firma española Iberdrola pretenden construir.

Hasta el momento, los inversionistas no tienen un contrato firmado para arrendar la tierra, pese a que en julio arrancan los primeros trabajos.

El presidente municipal de la localidad, Fidel Arcos Ramírez, reconoce que sólo hay acuerdos parciales entre ejidatarios y empresarios; esto a más de dos años de que se dieron los primeros acercamientos.

El ofrecimiento consistía en darles tractores y maquinaria, así como un pago de 833 pesos mensuales por la renta de 40 metros para instalar cada torre de medición de las corrientes de viento.

Sin embargo, el alcalde menciona que algunos ejidatarios muestran más resistencia para llegar a un acuerdo, debido a que -afirman- lo platicado sólo quedó en promesas.

Desconoce si hubo un contrato de por medio para garantizarles esos compromisos, pues fue un trato entre ellos.

Los permisos de uso de suelo, construcción y funcionamiento están dados, pero no sé cuál será la postura de quienes se sienten no incluidos en los beneficios que dejará la construcción del parque eólico , indica.

El proyecto denominado Pier, cuya inversión es por 120 millones de dólares, tiene considerada la instalación de 170 antenas para generar 365 Megawatts. La obra estaría arrancando a mediados de julio.

La primera planta abastecería de 65 MW, mientras que las otras dos serían de 150, cada una. Se prevé tenerlas listas en un plazo de cinco años.

sin convenio pactado

De las 1,200 hectáreas que tiene el ejido, sólo 450 les interesan a las empresas, por lo que los 60 ejidatarios aceptaron rentar sus tierras para ese proyecto eólico, pero no pasó más allá de una plática, refiere uno de los campesinos involucrados, Agustín Pérez.

El acercamiento se dio en el 2011 con un representante de la firma española de apellidos Maza Pérez, quien les comentó que la obra traería beneficios no sólo en apoyos, sino en generación de empleos para los lugareños, pero desde esa fecha no supieron más.

Comenta que hay división entre los ejidatarios, pues unos quieren rentar y otros ya no, por lo que tras el anuncio de que se iniciará la construcción de la primera planta a partir de julio próximo, no sabemos con quiénes hay un contrato .

miguel.hernandez@eleconomista.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas

Suscríbete