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Trabajadores de ICA Fluor van a paro en refinería de Dos Bocas; Marina toma el control

A partir de la mañana de este martes, cerca de 5,000 trabajadores de la constructora ICA Fluor iniciaron un paro de labores en la obra de la refinería de Dos Bocas, donde exigen que se les paguen horas extras y se obtengan mejores condiciones de trabajo.  

Imagen de las obras de construcción de la refinería Dos Bocas, en Tabasco. Foto: Archivo EE

Imagen de las obras de construcción de la refinería Dos Bocas, en Tabasco. Foto: Archivo EE

A partir de la mañana de este martes, cerca de 5,000 trabajadores –que representan el 17% de la fuerza laboral actual de la obra– de la contratista constructora ICA Fluor iniciaron un paro de labores en la obra de la refinería en Dos Bocas, Tabasco, donde exigen que se les paguen horas extras y se obtengan mejores condiciones de trabajo, ya que trabajan a marchas forzadas por concluir esta mega obra que el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que estará lista en julio del próximo año.  

De acuerdo con medios locales, desde las 9 horas de este martes inició el problema laboral más grave que se haya registrado en esta obra emblemática de la administración actual, aunque aseguran que ha habido otros connatos de manifestaciones que han sido resueltas.  

Elementos de la Secretaría de la Marina acudieron a las instalaciones petroleras para tomar control de la situación”, aseguraron. La Secretaría de Energía no ha respondido al ser cuestionada sobre el tema.  

Entre las exigencias de los trabajadores están aumentos salariales, pago de horas extras ya que las condiciones de alto calor y humedad obligan a que todos los días se extiendan las jornadas laborales; piden también que sus alimentos e hidratación corran por cuenta de la empresa, y equipo en mejores condiciones para realizar sus labores.  

Hasta el último reporte del primer mandatario mexicano, en la construcción de la refinería participan poco más de 30,000 trabajadores, ya que se encuentra en su pico de construcción, en la terminación de infraestructura fija y la instalación de grandes equipos, como tanques de almacenamiento y tratamiento de combustibles.  

La constructora mexicana ICA-Fluor obtuvo la adjudicación de dos de los seis paquetes de infraestructura y servicios con los que se construirá la nueva refinería de Dos Bocas: los paquetes 1 y 3, que son los de mayor valor económico de la obra y por lo menos representarán la cuarta parte de la inversión. 

"La Secretaría de Energía asignó a ICA-Fluor los paquetes 1 y 3 de la nueva refinería de Dos Bocas. El paquete 1 es relevante por su valor de 2,000 millones de dólares. En ese paquete van las plantas combinada y coquizadora retardada. El paquete 3 abarca la planta desintegradora catalítica, la isomerizadora de butanos", publicó entonces el comisionado de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) Luis Guillermo Pineda Bernal en su cuenta de Twitter. 

La planta, con un costo superior a los 8,900 millones de dólares para una capacidad instalada de 340,000 barriles diarios de crudo, que es la quinta parte de la capacidad actual en seis refinerías,  está diseñada para el proceso de crudo Maya de 22 grados API producirá 170,000 barriles diarios de gasolina y 120,000 barriles diarios de diésel. En el terreno de 566 hectáreas propiedad de Pemex, se instalarán 17 plantas de proceso y en se generarán 100,000 empleos directos. 

La refinería recibirá el crudo que se extrae en esa zona del Golfo de México y enviará productos vía marítima a las terminales de Tuxpan, Veracruz, Pajaritos y Progreso, además de que se conectará con la red de poliductos de Minatitlán y de ahí partirá a la Ciudad de México y a Salina Cruz para que también vía marítima sea posible surtir al Pacífico. 

Hasta la última comparecencia del director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, ante el Congreso, tres contratistas que recibieron por invitación la adjudicación directa de las obras: la coreana Samsung, la mexicana ICA Flúor y la italiana Technip continúan con los trabajos, luego de que la última entró en sustitución de la estadounidense KBR, que el semestre pasado dejó la obra luego de no lograr acuerdos con el gobierno ante el incremento en sus necesidades de inversión, confirmó el directivo ante los legisladores.

karol.garcia@eleconomista.mx 

Karol García es reportera de Empresas y Negocios.

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