United Airlines explora la compra de Airbus A321neo ante incertidumbre del Boeing 737 MAX 10

United Airlines se puso en contacto con Airbus para comprar más aviones A321neo con el fin de llenar el posible vacío dejado por el retrasado Boeing 737 MAX 10, en una iniciativa que podría aliviar el punto muerto en el que se encuentra un pedido por separado de aviones más grandes que lleva mucho tiempo retrasado, según fuentes del sector.

Visita de Scott Kirby a Toulouse y posibles negociaciones

El presidente ejecutivo de United, Scott Kirby, voló recientemente a Toulouse para sondear al fabricante de aviones sobre un posible acuerdo quid-pro-quo después de que una emergencia en pleno vuelo en un 737 MAX 9 de Alaska Airlines planteara nuevas dudas sobre la certificación del ya retrasado MAX 10, indicaron las fuentes.

"United Airlines ha mantenido conversaciones con Airbus sobre posibles alternativas al pedido del MAX 10. Hasta donde yo sé, no se ha llegado a ningún acuerdo", dijo una persona familiarizada con las conversaciones.

Las conversaciones se encuentran en una fase temprana y no hay garantías de que se llegue a un acuerdo, señalaron las fuentes.

Airbus y United Airlines declinaron hacer comentarios.

Repercusiones de la crisis en Boeing y estrategia de United Airlines

El viaje de Kirby a Toulouse, del que hasta ahora no se había informado, es el último giro de una crisis cada vez más grave en la que está sumida Boeing, que intenta tranquilizar a la opinión pública y a los organismos reguladores sobre la calidad y la seguridad de la producción, al tiempo que evita que se desbaraten pedidos clave.

La semana pasada, Kirby calificó la inmovilización parcial del MAX 9 como "la gota que colmó el vaso" tras los retrasos en la certificación del MAX 10, el mayor miembro de una familia de aviones empañada por una crisis de seguridad anterior provocada por dos accidentes mortales.

United no ha cancelado ninguno de los 277 MAX 10 que tiene encargados, pero los ha retirado de sus planes internos, según declaró Kirby a la prensa la semana pasada, lo que plantea interrogantes sobre cómo cubrirá el hueco en un momento en que su rival Airbus está muy vendido.