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Urgen a explotación sostenible de hidrocarburos

La recuperación económica tras la crisis sanitaria del Covid-19 provocará el incremento de la demanda y producción petrolera global, además de todas actividades de la industria, como se ha observado en el Congreso Mexicano del Petróleo de modalidad presencial en Monterrey.

La recuperación económica tras la crisis sanitaria del Covid-19 provocará el incremento de la demanda y producción petrolera global, además de todas actividades de la industria, como se ha observado en el Congreso Mexicano del Petróleo de modalidad presencial en Monterrey, Nuevo León, donde expertos coinciden en que enfrentan una nueva realidad: la urgencia de la transición hacia fuentes de energía limpia, por lo que más allá de bajar el consumo de combustibles fósiles, se puede comenzar a discutir la captura de carbono y producción sostenible de hidrocarburos.

El que en la administración pasada fue director de Petróleos Mexicanos Exploración y Producción (PEP), Gustavo Hernández García, aseguró a El Economista que se observa una lenta pero firme recuperación de la industria luego de la pandemia de movilidad y recursos humanos por la contingencia sanitaria del Covid-19, como se observó en la participación de asistentes al CMP en Monterrey, Nuevo León. 

“Parecía muy complicado que se llevara a cabo el foro, pero vimos que hasta el final se llenó, que es esperanzador, que podemos reunirnos y avanzar como industria”, dijo. 

Fernando Rodríguez de la Garza, especialista en energía de yacimientos y recuperación mejorada de hidrocarburos, luego de múltiples cargos en el Instituto Mexicano del Petróleo y Pemex además de que es miembro de la Academia de Ingeniería de México, del SPE y del Colegio de Ingenieros Petroleros de México, explicó que con base en diversas proyecciones todavía en el 2050 el 54% de la energía provendrá aún de fósiles, 29% a gas, 16% y carbón mineral 9%, mientras que en el año 2018 esta participación fue de 81%, con lo que además de la transición en materia eléctrica, los países deberán implementar medidas de captura de CO2 mediante recuperación mejorada en yacimientos petroleros, como una estrategia de combate frontal al cambio climático. 

“En todo este periodo se requerirá una inversión continua en la industria petrolera para mantener la producción en los niveles requeridos por la demanda global”, explicó, “la captura de carbón e hidrógeno serán los catalizadores de una descarbonización profunda después de 2035”, aseguró el experto en el marco de conferencias del Congreso Mexicano del Petróleo 2021. 

karol.garcia@eleconomista.mx

Karol García es reportera de Empresas y Negocios.

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