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Claro Chile acusa a Telefónica de bloquear la competencia
La empresa mexicana denuncia que la firma española ha entorpecido sistemáticamente sus esfuerzos de entrar al mercado de servicios 5G y ha puesto trabas para los usuarios que desean cambiar de proveedor de servicios.
Claro Chile denuncia que Telefónica ha promovido sistemáticamente recursos para impedirle hacerse de nuevo espectro radioeléctrico para la provisión de servicios 5G.
Claro Chile, del grupo de telecomunicaciones que controla Carlos Slim, presentó esta semana una demanda de juicio sumario ante el Décimo Octavo Juzgado Civil de la ciudad de Santiago, acusando a Telefónica de haber incurrido en dos clases de conductas de competencia desleal.
La empresa acusa que -a su juicio- Movistar abusó del ejercicio de acciones judiciales y administrativas para entorpecer la realización de un nuevo concurso 5G e impedir el ingreso de ClaroVTR al mercado para prestar servicios móviles de esta nueva tecnología, y evitar el cambio o portabilidad de clientes desde Movistar hacia Claro, entrabando -de acuerdo con lo señalado- el ejercicio del derecho a elección de los consumidores a través de vías ilegítimas.
Respecto de lo primero, Claro denunció que desde 2018 y hasta 2024, Telefónica desarrolló una estrategia global para entorpecer el inicio de la operación de servicios 5G de Claro en Chile en la banda 3.5 GHz. En la demanda asegura que la española tiene un modelo sistemático de actuación, con un único e ilícito objetivo final: no permitir la operación de servicios Móviles con tecnología 5G de Claro Chile o, al menos, retrasar su entrada al mercado de servicios 5G.
Según la demanda, esta estrategia se ha basado en la presentación de un entramado de innumerables acciones legales que obedecen a un diseño orquestado.
Cabe recordar que, en agosto de 2023, frente al nuevo e inminente concurso 5G, Telefónica ingresó una “Segunda Consulta de Caps o límites de tenencia de espectro ante el Tribunal de la Libre Competencia (TDLC)”, esto -según lo comunicado por ClaroVTR- “con el fin de inhibir su realización”.
“Posteriormente y frente al lanzamiento del nuevo concurso público 5G bajo la excusa de supuestas deficiencias en las bases del concurso público, Movistar inició dos procedimientos con el fin de evitar que se realizara el concurso público o, a lo menos, retrasar este proceso”, señaló ClaroVTR.
Esta seguidilla de acciones legales comenzó en 2018, cuando Telefónica hizo una consulta ante el TDLC sobre la ejecución de ciertas normas técnicas de la Subtel, con el objeto de evitar que Claro utilizara su antigua concesión de 3.5 GHz para servicios móviles 5G. En 2020, Movistar interpuso un recurso en contra del informe de pertinencia de Subtel para impedir que Claro obtuviera una nueva concesión en la banda 3.5 GHz.
Asimismo, en 2022, en el marco del joint venture entre Claro VTR, Telefónica solicitó ante el TDLC que se obligara a Claro a desprenderse de la mayor cantidad de espectro posible. Y poco después interpuso un recurso de reposición contra la resolución que permitía a Claro utilizara su antigua concesión en 3.5 GHz para servicios móviles.
Dos conductas desleales
La segunda clase de conducta de competencia desleal destinada a desviar clientela de Claro que alega la demanda dice relación con una serie de técnicas ilícitas utilizadas por Telefónica para dificultar la migración de clientes desde Movistar a Claro. Según una auditoría de Claro de noviembre de 2024, hubo un incremento de respuestas de rechazo emitidas por Movistar. Para Claro, “hay una evidente intención de desviar la clientela de la compañía, capturando o reteniendo indebidamente a usuarios que han presentado solicitudes de portación”.
