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Demanda agregada tiene mejora discreta en julio

El consumo privado creció 0.8% y la inversión fija 1.8%, aunque en ambos casos se mantiene una desaceleración en términos acumulados.

FACHADA INEGI

FACHADA INEGIECONOMISTA

Gráfico EE

Al inicio del segundo semestre del 2024, la demanda agregada en México recuperó aliento, aunque apenas se matizó el tono de desaceleración que ha dominado a lo largo del año. 

Por un lado, el consumo privado, que es el componente más importante en volumen repuntó 0.8% mensual, con lo que recuperó algo de impulso, luego de un tímido crecimiento de 0.1% que tuvo en junio.

Por otro, la inversión fija, menos voluminosa que el consumo privado, pero con mayor impacto en el crecimiento de largo plazo de la economía, rebotó 1.8% luego de haberse contraído 0.7% durante el mes previo y tuvo su mejor avance mensual desde agosto del año pasado, cuando creció 2 por ciento.

Los datos se desprenden de los reportes del Indicador Mensual del Consumo Privado (IMCP) y del Indicador Mensual de la Formación Bruta de Capital Fijo (IMFBCF), divulgados este miércoles por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).

El alza del consumo en julio se fundamentó por una notable recuperación del consumo de bienes importados, que subió 4.1% y dejó atrás tres meses de descensos que habían coincidido con la paulatina depreciación del peso observada desde mayo y que parece haber sido asimilada durante el séptimo mes del año.

En tanto, el consumo de bienes nacionales creció 0.3% y el de servicios, lo hizo 0.2 por ciento. En el primer caso se hilaron tres meses de avances y en el segundo, dos, aunque se trata de mejoras discretas.

El avance del consumo coincidió con la reactivación del pago de programas sociales, luego de que los pagos correspondientes de marzo a junio se adelantaron en febrero, para no interferir con las campañas electorales rumbo a las elecciones del pasado 2 de junio.

El empuje de la inversión fija en julio provino principalmente del gasto en construcción residencial —que es en su mayoría privada— y, en menor medida de del gasto en maquinaria y equipo.

En el primer caso se observó un avance mensual de 5% que remontó la caída de 4.8% de junio; en tanto, en el segundo se observó un alza mensual consolidada de 0.9%, donde la inversión en equipo de transporte de origen importado destacó, con un salto de 12.1 por ciento.

De forma acumulada, el consumo privado creció 3.8% durante los primeros siete meses del año, cuando un año atrás el avance era de 5.2 por ciento.

Editor de Empresas y Negocios en El Economista

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