En noviembre se crearon casi 25,000 empleos formales

En noviembre pasado la generación de empleo formal registrado ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se redujo 76% en términos anuales a 24,696 plazas, cifra que resulta la menor para cualquier noviembre de los últimos 16 años. 

Dicha cifra es el saldo de la generación neta de 28,683 empleos formales y el despido, también neto, de 3,987 trabajadores, mostró el reporte mensual del IMSS.

Dese otra arista, de enero a noviembre las nuevas contrataciones cayeron 40.2% a 619,252, cifra que, a su vez, es la más baja desde el 2009, dejando de lado la caída neta del empleo registrada en el 2020 al tratarse de un año atípico por la irrupción de la pandemia de Covid-19.

Si bien la reducción en el ritmo de contrataciones ha estado patente a lo largo de todo el 2024, en los últimos dos meses coincidió con el cambio de gobierno federal, lo que, afirma el IMSS, influye en el ejercicio del presupuesto público ante la necesidad, por ejemplo, de cerrar ciertas obras públicas, lo que impacta la generación de empleo.

Asimismo, la cautela estacional en las contrataciones del sector privado ante la expectativa por el cambio de gobierno se adelantó dos meses, pues en transiciones sexenales anteriores el pase de estafeta se llevaba a cabo en diciembre y ahora tuvo lugar en octubre.

Así, al 30 de noviembre de 2024, se tienen registrados ante el IMSS 22 millones 643,638 puestos de trabajo, de los cuales el 86.6% son permanentes y el 13.4% son eventuales.

Dejando de lado el efecto por la transición de gobierno, el empleo formal en el país muestra una clara desaceleración, dijeron especialistas quienes destacaron que en todo el año apenas se podrían alcanzar 400,000 empleos.

Rodolfo Ostolaza, subdirector de Estudios Económicos de Banamex, comentó que el empleo formal se estancó prácticamente desde los meses de julio, agosto y septiembre y lejos de haber incrementado el número de registros es contrario ya que “eliminando la estacionalidad, por segundo mes consecutivo nos arroja una caída en cifras comparables mes a mes, y en octubre y noviembre la caída es de punto 1% mensual, que son en promedio cada mes 18,000 trabajadores menos”.

Lo anterior, dijo, significa que el empleo formal muestra una tendencia decreciente y esto se contrapone con los datos de octubre, sobre la tasa de desempleo que tocó un mínimo histórico de 2.5% y que nunca había ocurrido; pero, lo que sucedió es que en realidad aumentó la subocupación y el número de personas que dejaron de buscar empleo”.

Desde otro ángulo, destaca que en los últimos 12 meses se crearon en el país 234,370 empleos, lo que refleja un crecimiento de 1% del total de trabajadores asegurados. Esta tasa revela que la creación de empleo crece a un ritmo que representa una cuarta parte del avance de 4.1% que se observó en mayo del 2023, cuando tuvo lugar su último pico.

El crecimiento anual del empleo también fue el menor observado desde abril del 2021, cuando se expandía a una tasa de 0.7%, aunque en ese momento la variable venía saliendo del bache que representó la pandemia del 2020.

El sector que más ha lastrado los resultados generales del empleo es el de la construcción. En noviembre, la nómina del sector se contrajo 4.6% a un millón 841,573 personas, que representan 8.1% del total de trabajadores dados de alta ante el IMSS.

Detrás del sector del ladrillo, el agropecuario también registró una contracción de 2.9%, quedando con una plantilla de 725,099 personas empleadas.

En tanto, la manufactura, que es el sector que más aporta al empleo formal en México tuvo una variación casi nula (+0.03%) para quedar con seis millones 77,360 trabajadores, que representan 26.8% del total de trabajadores formales.

Prende alertas

Ana Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del IMCO, destacó que “hay un crecimiento marginal del 1% y en el acumulado es el más grave, tenemos 619,000 puestos que, si se compara con los últimos tres años, en un mismo periodo, en todos los casos había más de un millón de puestos generados, aunque los que se reportan en esta ocasión sean en su mayoría permanentes”.

Añadió que “la generación de este año es 40% menor a la de 2023, y se mostró escéptica, de momento de que el dato esté asociado al cambio de gobierno. “Eso lo tenemos que seguir viendo, además porque vienen las bajas de diciembre que se registran de manera estacional. Lo que advertimos es que cerraremos un dato no bueno”.

Ostolaza, especialista de Banamex, dijo que, aunque no ve un impacto directo inmediato para el empleo tras las amenazas del próximo presidente de Estados Unidos de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas, no por las reformas constitucionales que se han aprobado en México, dijo que “hay incertidumbre que está retrasando las decisiones de inversiones, como también las decisiones de consumo. Además, el paquete fiscal tampoco ayuda mucho porque tiene supuestos que se salen del consenso”.

Recordó que desde que tomó posesión como presidente Carlos Salinas de Gortari, en todas las transiciones el crecimiento ha sido mucho menor que el crecimiento del último año de la administración saliente.

“Si el crecimiento para 2024 fuera 1.6% como lo piensa el consenso en este momento, probablemente se vea afectado con todos los cambios, aunado al freno que se está poniendo a la inversión pública y privada con malos augurios de la relación México y Estados Unidos, pinta un crecimiento menor para el próximo año”.

Maria Fonseca, directora Instituto Familias Empresarias del Tec Monterrey, añadió que “en los últimos meses estaba contenida la economía por la incertidumbre que generaba conocer las posturas que tomaría la nueva administración; no obstante, el mercado mexicano debe aplicarse para aprovechar la posibilidad de mayor inversión por el nearshoring y buscar que se active la economía, si bien de manera moderada, puede permitir ver un panorama económico con cautela, pero accionado”.