Lectura 3:00 min
Nearshoring, oportunidad temporal; urge trabajar para atraer inversiones
Habrá un momento en que las empresas se relocalizaron, las cadenas productivas se establecieron y el asunto del nearshoring se acabó. Si seguimos con el rumbo que tenemos ahorita, esa oportunidad se va a desperdiciar, detalló Javier Guzmán Calafell.
El nearshoring es una oportunidad extraordinaria para México. Pero no es exclusiva para el país y no estará abierta permanentemente, advirtió el ex miembro de la Junta de Gobierno de Banco de México, Javier Guzmán Calafell.
“Habrá un momento en que las empresas se relocalizaron, las cadenas productivas se establecieron y el asunto del nearshoring, se acabó. El efecto es de largo plazo porque ahí se quedan las inversiones, pero la ventana de oportunidad no estará abierta de manera permanente. Si seguimos con el rumbo que tenemos ahorita, esa oportunidad se va a desperdiciar”, sentenció el también coordinador del Libro “México en la encrucijada” .
Entrevistado por El Economista, tomó los resultados de las diversas encuestas que aplica Banco de México, sobre las expectativas de especialistas del sector privado y empresas para enumerar los principales obstáculos que limitan la posibilidad de crecer. Obstáculos que refirió también como factores que pueden acotar la oportunidad de que el país se beneficie de esta relocalización.
“Los limitantes más importantes que mencionan las empresas son el acceso a suficiente electricidad, agua, gas, seguridad y estado de derecho. Ninguna de estas condiciones se ha cumplido y en un entorno en el que además se introduce una serie de reformas que somete a cuestionamientos adicionales al estado de derecho, evidentemente los incentivos para que la inversión venga hacia México se deterioran”.
El nearshoring, es tocado en el libro al menos en tres capítulos, los escritos por el representante de Banco Mundial en México, Mark Thomas; por el exresponsable de las negociaciones regionales y multilaterales de la Organización Mundial de Comercio, Luis de la Calle y el economista en jefe para México y América Latina de Bank of America Securities, Carlos Capistrán.
Señaló que los factores que más preocupan para el nearshoring, son infraestructura, conectividad, mejorar el capital humano, un desarrollo tecnológico más acelerado. “Se trata de elementos que México necesita con o sin nearshoring”.
Reforma al poder judicial alimenta incertidumbre
El experto accedió a hacer un acercamiento sobre el marco institucional y marco legal que forma parte de uno de los cuatro grandes bloques en los que se divide el libro, donde destaca la pluma y experiencia del autor José Ramón Cossío, ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia.
Advirtió que las reformas para modificar al poder judicial y desaparecer los órganos autónomos, van en un sentido opuesto de lo que necesitaríamos para aprovechar la oportunidad que representa el nearshoring, porque generan incertidumbre.
Pero no es el único problema. Porque desestimula a la Inversión Extranjera Directa así como a la nacional. En un marco jurídico donde las reglas del juego no están claras, pues obviamente las inversiones se vuelven más cautelosas”.
Cuando José Ramón Cossío habla en el citado libro de la perspectiva sobre la falta del estado de derecho, dice que hay pocos elementos para pensar que va a mejorar en el corto plazo.
“El interés principal del poder, que se ha acentuado de manera dramática ahora con estas reformas, es mantenerlo y fortalecerlo. En el capítulo (del libro) desglosa de manera detalladísima dónde están los problemas con las limitantes de la falta de estado de derecho en México a lo largo de los años”.
Javier Guzmán se encuentra en gira para presentar el libro “México en la Encrucijada” donde coordinó a 11 autores. Una propuesta que tiene el objetivo de ayudar en la agenda económica de los próximos años y dar al público elementos sobre los principales retos económicos de México y la forma de superarlos.