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Proyecto Tía María enfrenta nueva traba en Perú

La acción de amparo presentada en Lima busca que el Poder Judicial declare la “caducidad” del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero Tía María, aprobado en 2014 y cuya vigencia expiró en 2019.

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Perú es uno de los mayores productores de cobre del mundo. Foto: EspecialCreditos automáticos

Agricultores, vecinos de un proyecto cuprífero de más de 1,800 millones de dólares de un grupo minero de México, interpusieron el viernes un recurso judicial en la Corte Superior de Lima para detener el inicio de la construcción anunciado por la compañía para 2025.

La acción de amparo presentada en Lima busca que el Poder Judicial declare la “caducidad” del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero Tía María, “aprobado en 2014 y cuya vigencia expiró en 2019”, dijo a The Associated Press uno de los abogados de los campesinos, David Velazco. Recordó que en Perú los Estudios de Impacto Ambiental tienen una vigencia máxima de cinco años, según la ley.

“No existiendo un estudio de impacto ambiental, no se puede desarrollar el proyecto minero”, añadió Velazco. Recordó que los campesinos del Valle de Tambo ocupan 15,000 hectáreas donde siembran arroz, ajos, papas, cebollas y aguacates, que exportan a países como Ecuador y Colombia.

El proyecto minero Tía María, de 1,800 millones de dólares, estaba suspendido desde 2019 tras violentas protestas. En febrero del 2025 la compañía indicó que empezarían a construir “este año”. En julio de 2024, la presidenta peruana, Dina Boluarte, indicó en un discurso ante el Parlamento que el proyecto “generará recursos que potenciarán el desarrollo del Valle del Tambo”. La AP escribió a la filial local del Grupo México, que controla el proyecto minero peruano, en busca de comentarios, pero no los obtuvo al momento. También pidió comentarios al Ministerio de Energía y Minas sin obtener una respuesta. Las disputas entre agricultores y la minera mexicana tienen más de una década.

Los agricultores se oponen a la construcción de la mina porque consideran que la explotación a cielo abierto contaminará un río desde el que riegan sus cultivos. Pero Grupo México asegura que usarán agua de mar desalinizada y, para el transporte de sus suministros y producción de cobre, se construirá un ferrocarril industrial.

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