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Desaladoras, solución para sequía extrema en municipios de BC
Proyectan suministro de 2 mil 200 litros de agua por segundo.
Tijuana, BC. Debido a la extrema sequía que han padecido por años los municipios de Tijuana y Ensenada, la construcción de plantas desaladoras se ha convertido en una propuesta de solución para la falta de agua, advirtió el director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), Miguel Lemus.
El funcionario detalló que la declaratoria de sequía y extrema sequía en estos dos municipios fue necesaria ya que en los últimos 12 años no se ha registrado lluvias en ninguna de las dos ciudades, como había ocurrido en otras temporadas de invierno, lo cual ha terminado por afectar actividades como la siembra, principalmente al sur del puerto ensenadense, donde se concentra la mayor parte de la agricultura.
Es importante que en Baja California tengamos una segunda fuente de suministro de agua potable, además del Río Colorado, ya que Tijuana está considerada a nivel nacional como el único punto de extrema sequía en el país; por eso es que estamos previendo tener una segunda fuente de suministro para Tijuana y Rosarito , refirió.
Lemus explicó que actualmente está en proceso de construcción una planta desaladora en Playas de Rosarito, la cual servirá para brindar servicio urbano a las miles de casas que están situadas en este municipio, así como en Tijuana y Tecate. Ello a diferencia de las plantas que ya operan en otras ciudades como Ensenada y que solamente suministran de agua a pequeñas comunidades, principalmente para actividades de ganadería y agricultura.
Los responsables de la ejecución del proyecto son el gobierno del estado y las empresas NuWater y Degremont, ambas, filiales en México del consorcio internacional y la compañía mexicana NSC Agua.
El titular de la CESPT dijo que dicho proyecto se convertirá en la segunda fuente de suministro de agua potable para la ciudad, que proveerá 2,200 litros por segundo mediante un contrato de compraventa.
Detalló que estiman que la planta inicie operaciones a finales del próximo año, cuando estaría terminando su primera etapa; y para el 2025 fecha en que finalizará la segunda se espera que al concluir el proyecto en su totalidad también se pueda abastecer a Ensenada.
